Nuevos detalles sobre el crimen que desató una ola de violencia en Becerril, que dejó seis predios incinerados, se conocieron por parte de un familiar del hombre acusado de asesinar a Heder Enrique Caballero De León, en medio de una riña en la noche del domingo.

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El hermano del presunto homicida Urdenor Francisco Daza Beleño, que en diálogo con EL PILÓN pidió reserva de su identidad, comunicó que los hechos no se debieron a un problema de celos por una mujer sino a los constantes abusos que algunos usuarios realizaban en el bar la Nueva Ola, entre esos el hoy fallecido, quien era el esposo de una integrante de la etnia yukpa.

“La esposa de mi hermano llegó y los sacó del establecimiento a todos porque le estaban partiendo la silla y muchas cosas. Apenas los sacaron a ellos, que ahí también estaban unos drogadictos, levantaron la puerta a patadas, entonces viene la pareja de mi hermano abre el sitio y ellos se meten y cachetean al cantinero y cuando mi hermano viene entrando uno de ellos le hace un forcejeo a tirarle a pegar, él en medio de eso es que saca el arma haciendo como cuatro impactos de bala”, dijo el pariente de Daza Beleño, quien ha sido señalado de matar a Caballero De León.

Explicó además que no era la primera vez que ocurrían hechos similares y que ese día algunos miembros de la etnia yukpa estaban armados con machete.

Entre tanto, la versión entregada por la compañera sentimental de este a las autoridades indica que la discusión involucró al administrador del lugar Edgar Enrique Rodríguez y eso propició que minutos después llegara Daza Beleño atacando a bala.

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“En cierto punto siempre pasaba lo mismo, lo que pasó el domingo yo digo que de tanto guardado disparó toda la impotencia, y no pensó mi hermano en el momento sino que pasaron las cosas. Ellos nos incendiaron seis predios que hoy prácticamente la familia quedó en la calle solamente con la ropa que tiene puesta. A mi hermano le quemaron la casa, a unos primos, fueron seis familias perjudicadas y hay una que está que la pared se le cae y que no es nada de nosotros”, añadió el joven.

Entre los predios afectados por la represalia que tomaron cerca de 40 yukpas por la muerte de Caballero De León, está el establecimiento la Nueva Ola de propiedad de Urdenor Francisco Daza Beleño, el cual quedó totalmente en ruinas.

Esto propició un consejo de seguridad en Becerril para analizar la situación jurídicamente por la pérdida de los bienes materiales de algunos habitantes.

Asimismo los representantes de los indígenas se pusieron en contacto con los jefes de la guardia de su colectividad para minimizar la problemática y llegar a una conciliación con las autoridades.

Por: Marllelys Salinas M. / EL PILÓN
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