El programa Green Pass de la organización Terpel realizó el primer reconocimiento a nivel local del comerciante vallenato Carlos Martínez por su compromiso con el medio ambiente y la lubricación sostenible y confiable desde su negocio Lubridiesel.

La organización Terpel  busca certificar a nivel nacional a comerciantes que contribuyan con la preservación del medio ambiente de una manera sostenible y sustentable. Así mismo, la compañía brinda la oportunidad para identificar y mejorar estrategias que pueden aprovechar en pro del ecosistema.

“El programa está certificado por medio de Icontec. Nuestros agentes comerciales autorizados escogen algunos clientes que consideran cumplen con los requisitos. Carlos Martínez con su punto de venta Lubridisel logró un puntaje muy superior al esperado y esto lo ubicó en categoría oro”, expresó Reinaldo Romero, jefe de zona de lubricante de la organización Terpel.

El puntaje que obtuvo Lubridiesel en la inspección fue de 92,34 puntos, por lo tanto se convirtió en un punto de venta nivel oro, garantizando un excelente servicio y además  el buen uso que se le da al material utilizado.

“Nosotros tenemos una bodega que cumple con todos los requerimientos técnicos para que el lubricante no se riegue y no se ocasione ningún daño al medio ambiente. Tenemos una buena manera de almacenamiento y posteriormente lo entregamos a unas empresas reconocidas por el Estado que nos permite también y nos genera unas certificaciones del buen uso de los materiales utilizados”, manifestó Carlos Martínez, propietario de Lubridiesel.

El punto de venta de Carlos Martínez lleva más de 15 años en funcionamiento a la comunidad. El establecimiento ofrece un servicio en pro del bienestar social y el ambiente, ha sido pionero en la certificación del programa ofertado por la organización distribuidora de productos derivados del petróleo y el gas, gracias a la gestión y las estrategias que lo han catapultado a ser el primer vallenato en obtener esta mención.

“Es muy satisfactorio para nuestra empresa, siento que incluso para nuestra ciudad, porque eso indica que estamos progresando, que estamos haciendo las cosas bien”, manifestó Martínez.

La certificación, que no es sencilla, según lo manifestado por Martínez, le costó trabajo y esfuerzo que hoy puede ver materializado en su local. “Es un esfuerzo, una actividad que hay que hacer. No es un proceso sencillo, la visita demora más de 4 horas, pero nosotros siempre hemos venido cumpliendo, tenemos todas las certificaciones pertinentes”.

Cabe resaltar que esta es la primera fase del programa y muy pronto se espera se dé continuidad a la segunda, donde otros comerciantes podrán aspirar al reconocimiento.

Por Melissa Valle

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