Durante varias semanas, Arturo Calderón Rivadeneira intentó conseguir el aval del partido Liberal para ser candidato a la Gobernación del Cesar. Sin embargo, el congresista Carlos Felipe Quintero (jefe de la colectividad en el departamento) ya había decidido que solo coavalarían al elegido por los Gnecco. La elegida fue Elvia Milena Sanjuán.
Durante varias semanas, Arturo Calderón Rivadeneira intentó conseguir el aval del partido Liberal para ser candidato a la Gobernación del Cesar. Sin embargo, el congresista Carlos Felipe Quintero (jefe de la colectividad en el departamento) ya había decidido que solo coavalarían al elegido por los Gnecco. La elegida fue Elvia Milena Sanjuán.
Al final, Arturo Calderón se inscribió como candidato, pero por el Partido Ecologista Colombiano. Para Calderón, esta es una campaña atípica. Los tiempos cambiaron. Sin las fuerzas ni los apoyos de una década atrás, quiere ser protagonista en esta contienda electoral.
Esta es la cuarta vez.
He sido un hombre de convicciones y decisiones toda la vida. He sido perseverante. Si bien a veces siento que mi paz debe ser innegociable, el interés particular cede ante el interés general. Haciendo una retrospectiva me di cuenta que el Cesar ha involucionado. La salud, el desarrollo del sector agropecuario, la educación, están peor que hace 15 años.
No han escuchado a nadie en los últimos 12 años. No han hecho ni un consejo comunal, en un corregimiento, que la gente diga “esta es la obra prioritaria”. Invierten los recursos según un capricho. El dinero que tiene el departamento es suficiente para darle uniforme a los estudiantes de los estratos 1 y 2, eso es invertir en el ser humano. Mientras la madre trabaja, no encuentra al hijo desde el mediodía desocupado. Si logramos la jornada completa le arrebatamos estos jóvenes a la criminalidad.
Estamos peor que en el 2006. Hemos retrocedido en salud, empleo, educación… Si le llevamos a las universidades una madera que no es buena, el mueble no será bueno. Si llevamos un estudiante mal preparado, no tendremos buenos profesionales.
Nadie levanta la voz. Hoy se están quebrando las clínicas porque tienen un monopolio con dos clínicas. Esa es nuestra preocupación: monopolizaron las cosas. Por eso creemos que debemos diversificar y que todos progresen.
La democracia es un acuerdo entre hombres libres e iguales. En el Cesar no hay democracia, ni libertad, porque con la necesidad es difícil que la gente sea libre. Están cohesionados por la necesidad. Votan por necesidad. Como dice ‘Maná’: lo que hay es un sentimiento de los excluidos.
Los constructores, que no se levantan y no levantan su voz; los ingenieros y arquitectos que no tienen oportunidad de construir nada en el departamento… Están en una resignación que es como droga que adormece. Las revoluciones y cambios de sistema no los lidera el pueblo; el pueblo espera que los líderes se levanten. En el Cesar hace falta una élite que diga basta ya.
¿Quiénes lideraron la independencia en Colombia? Simón Bolívar, quien estudió en Inglaterra. Antonio Nariño estudiaba en Francia. Ellos eran de la élite, pero dijeron basta ya, y en el Cesar hace falta esa élite que diga basta ya.
Las élites de los constructores, del sector salud, del sector agropecuario. Los campesinos están esperando de ellos. Cuando hablo de élite me refiero a las personas que tuvieron la providencia para estudiar y prepararse.
La élite del periodismo también debe participar y ser más social; la élite de los empresarios, que hoy se sienten excluidos. El Cesar es el departamento de los excluidos. Yo conocí esa exclusión dentro del partido Liberal. Le dieron el coaval a un candidato por presión.
Este ha sido un gobierno interino en un 80 %. El señor gobernador (Luis Alberto Monsalvo) no ha gobernado de manera directa. El joven Luis Alberto Monsalvo merecía un mejor destino, pero ese anillo, ese círculo que lo rodea, con su voracidad por la cosa pública, lo mantienen en esa situación.
Y ahora, sin mesura alguna ponen una candidata con varios problemas en etapas de juicio. ¿Lo hicieron para volver a la interinidad? El departamento no puede elegir a candidatos con problemas. Necesitamos gobernabilidad y transparencia.
No pasó nada, me di cuenta que ellos no cambiaban. Cuando hice alianzas con el joven Luis Alberto Monsalvo buscaba cambiar el sistema de salud en el departamento, sacar a la gente de las cuatro paredes y llevarlos a las calles.
La salud debe estar fuera de los muros, en los hogares, que vaya a prevenir la violencia intrafamiliar, a controlar la producción del dengue, a conocer si hay mujeres gestantes aguantando hambre, controles de crecimiento. Eso es lo que tenemos que perseguir. Que todos los niños estén en los colegios.
Económicamente no hay salida para un buen empleo. Los recursos del departamento se pueden irrigar democráticamente, con oportunidades. Pero hoy todo se ha centralizado. Hoy la vigilancia la tiene una sola empresa; las tipografías ya no se contratan, tiene una propia; alimento, transporte, contratación de obras… No circula el dinero, y por eso todos los negocios terminan quebrando.
No hay oportunidades para la gente. Por eso perservero y llamo a los candidatos a que nos unamos y que sea el pueblo el que determine a través de una encuesta, quién debe liderar esto.
Claro, porque ellos viven de la miseria y de la necesidad de la gente. No buscan un voto persona a persona, sino que violan todos los topes electorales. La invitación es que nosotros lleguemos al voto primario, que el padre entienda que su hijo y su nieto no están condenados a sufrir lo mismo.
Donde llego haciendo campaña la gente dice: ¡únanse! Pueden sacar el dinero que quieran, pero si nos unimos los derrotamos.
Debemos entender algo: el gobernador tiene la misma responsabilidad sobre Valledupar que el alcalde. Siempre se culpa al mandatario municipal, pero nunca se señala al gobernador.
En Valledupar no se la pueden tirar toda al alcalde, por eso todos terminan quemados. El fondo de seguridad del departamento es cinco veces más grande que el de Valledupar. ¿Por qué no invertir en inteligencia? ¿O es que Valledupar no pertenece al Cesar? Ni los medios culpan al gobernador de la seguridad en Valledupar. Y resulta que los recursos están en el departamento.
Apenas estoy abriendo la sede. Allí estará el partido Ecologista, el candidato a la Alcaldía y los candidatos al Concejo. Recuerden que yo me inscribí el sábado a última hora. El Partido Ecologista me abrazó y me dio el aval, y yo valoro esa confianza que depositaron en mí. Yo les pedí 10 días para organizar una campaña tan compleja a la Gobernación del Cesar.
Durante varias semanas, Arturo Calderón Rivadeneira intentó conseguir el aval del partido Liberal para ser candidato a la Gobernación del Cesar. Sin embargo, el congresista Carlos Felipe Quintero (jefe de la colectividad en el departamento) ya había decidido que solo coavalarían al elegido por los Gnecco. La elegida fue Elvia Milena Sanjuán.
Durante varias semanas, Arturo Calderón Rivadeneira intentó conseguir el aval del partido Liberal para ser candidato a la Gobernación del Cesar. Sin embargo, el congresista Carlos Felipe Quintero (jefe de la colectividad en el departamento) ya había decidido que solo coavalarían al elegido por los Gnecco. La elegida fue Elvia Milena Sanjuán.
Al final, Arturo Calderón se inscribió como candidato, pero por el Partido Ecologista Colombiano. Para Calderón, esta es una campaña atípica. Los tiempos cambiaron. Sin las fuerzas ni los apoyos de una década atrás, quiere ser protagonista en esta contienda electoral.
Esta es la cuarta vez.
He sido un hombre de convicciones y decisiones toda la vida. He sido perseverante. Si bien a veces siento que mi paz debe ser innegociable, el interés particular cede ante el interés general. Haciendo una retrospectiva me di cuenta que el Cesar ha involucionado. La salud, el desarrollo del sector agropecuario, la educación, están peor que hace 15 años.
No han escuchado a nadie en los últimos 12 años. No han hecho ni un consejo comunal, en un corregimiento, que la gente diga “esta es la obra prioritaria”. Invierten los recursos según un capricho. El dinero que tiene el departamento es suficiente para darle uniforme a los estudiantes de los estratos 1 y 2, eso es invertir en el ser humano. Mientras la madre trabaja, no encuentra al hijo desde el mediodía desocupado. Si logramos la jornada completa le arrebatamos estos jóvenes a la criminalidad.
Estamos peor que en el 2006. Hemos retrocedido en salud, empleo, educación… Si le llevamos a las universidades una madera que no es buena, el mueble no será bueno. Si llevamos un estudiante mal preparado, no tendremos buenos profesionales.
Nadie levanta la voz. Hoy se están quebrando las clínicas porque tienen un monopolio con dos clínicas. Esa es nuestra preocupación: monopolizaron las cosas. Por eso creemos que debemos diversificar y que todos progresen.
La democracia es un acuerdo entre hombres libres e iguales. En el Cesar no hay democracia, ni libertad, porque con la necesidad es difícil que la gente sea libre. Están cohesionados por la necesidad. Votan por necesidad. Como dice ‘Maná’: lo que hay es un sentimiento de los excluidos.
Los constructores, que no se levantan y no levantan su voz; los ingenieros y arquitectos que no tienen oportunidad de construir nada en el departamento… Están en una resignación que es como droga que adormece. Las revoluciones y cambios de sistema no los lidera el pueblo; el pueblo espera que los líderes se levanten. En el Cesar hace falta una élite que diga basta ya.
¿Quiénes lideraron la independencia en Colombia? Simón Bolívar, quien estudió en Inglaterra. Antonio Nariño estudiaba en Francia. Ellos eran de la élite, pero dijeron basta ya, y en el Cesar hace falta esa élite que diga basta ya.
Las élites de los constructores, del sector salud, del sector agropecuario. Los campesinos están esperando de ellos. Cuando hablo de élite me refiero a las personas que tuvieron la providencia para estudiar y prepararse.
La élite del periodismo también debe participar y ser más social; la élite de los empresarios, que hoy se sienten excluidos. El Cesar es el departamento de los excluidos. Yo conocí esa exclusión dentro del partido Liberal. Le dieron el coaval a un candidato por presión.
Este ha sido un gobierno interino en un 80 %. El señor gobernador (Luis Alberto Monsalvo) no ha gobernado de manera directa. El joven Luis Alberto Monsalvo merecía un mejor destino, pero ese anillo, ese círculo que lo rodea, con su voracidad por la cosa pública, lo mantienen en esa situación.
Y ahora, sin mesura alguna ponen una candidata con varios problemas en etapas de juicio. ¿Lo hicieron para volver a la interinidad? El departamento no puede elegir a candidatos con problemas. Necesitamos gobernabilidad y transparencia.
No pasó nada, me di cuenta que ellos no cambiaban. Cuando hice alianzas con el joven Luis Alberto Monsalvo buscaba cambiar el sistema de salud en el departamento, sacar a la gente de las cuatro paredes y llevarlos a las calles.
La salud debe estar fuera de los muros, en los hogares, que vaya a prevenir la violencia intrafamiliar, a controlar la producción del dengue, a conocer si hay mujeres gestantes aguantando hambre, controles de crecimiento. Eso es lo que tenemos que perseguir. Que todos los niños estén en los colegios.
Económicamente no hay salida para un buen empleo. Los recursos del departamento se pueden irrigar democráticamente, con oportunidades. Pero hoy todo se ha centralizado. Hoy la vigilancia la tiene una sola empresa; las tipografías ya no se contratan, tiene una propia; alimento, transporte, contratación de obras… No circula el dinero, y por eso todos los negocios terminan quebrando.
No hay oportunidades para la gente. Por eso perservero y llamo a los candidatos a que nos unamos y que sea el pueblo el que determine a través de una encuesta, quién debe liderar esto.
Claro, porque ellos viven de la miseria y de la necesidad de la gente. No buscan un voto persona a persona, sino que violan todos los topes electorales. La invitación es que nosotros lleguemos al voto primario, que el padre entienda que su hijo y su nieto no están condenados a sufrir lo mismo.
Donde llego haciendo campaña la gente dice: ¡únanse! Pueden sacar el dinero que quieran, pero si nos unimos los derrotamos.
Debemos entender algo: el gobernador tiene la misma responsabilidad sobre Valledupar que el alcalde. Siempre se culpa al mandatario municipal, pero nunca se señala al gobernador.
En Valledupar no se la pueden tirar toda al alcalde, por eso todos terminan quemados. El fondo de seguridad del departamento es cinco veces más grande que el de Valledupar. ¿Por qué no invertir en inteligencia? ¿O es que Valledupar no pertenece al Cesar? Ni los medios culpan al gobernador de la seguridad en Valledupar. Y resulta que los recursos están en el departamento.
Apenas estoy abriendo la sede. Allí estará el partido Ecologista, el candidato a la Alcaldía y los candidatos al Concejo. Recuerden que yo me inscribí el sábado a última hora. El Partido Ecologista me abrazó y me dio el aval, y yo valoro esa confianza que depositaron en mí. Yo les pedí 10 días para organizar una campaña tan compleja a la Gobernación del Cesar.