El colectivo que hace parte de la ‘Fundación la Matrona y sus Mujeres Artesanas’, en su mayoría madres cabeza de hogar, este año se toma nuevamente varios puntos de la ciudad para ofrecer los dulces más típicos y emblemáticos de la región.

Como parte de la cultura y la idiosincrasia vallenata que se niega a desaparecer, los dulces en Semana Santa se convirtieron en una de las tradiciones más importantes y distintivas de la ‘Capital Mundial del Vallenato’.

Un hecho que, sin duda, marcó un precedente en virtud de las protagonistas de una herencia gastronómica que año tras año atraen a cientos de ciudadanos de todo el país a degustar los productos típicos de la región. “Esto es una tradición que es de nuestros ancestros que yo he venido rescatando y que no quiero que se pierda”, manifestó Rita Lúquez.

Con una renovación impecable, la ‘Matrona’ y sus mujeres artesanas han trabajado incansablemente durante 27 años por preservar uno de los legados más antiguos de la región. Del emprendimiento se han beneficiado más de 100 mujeres y hombres a nivel departamental.

“La Fundación tiene mujeres estrato uno, que son cabeza de hogar, desplazadas, afro e indígenas. Actualmente son más de 100 beneficiarios, entre hombres y mujeres, que trabajan en la Fundación”, agregó Lúquez.

Cada trabajador, formado y certificado, labora cada año en la ‘Ruta del dulce’ de Valledupar. Los microempresarios tienen la oportunidad de recibir el conocimiento y transmitir el saber adquirido.

“Esto es una gran oportunidad y bueno la idea es seguir acá, crecer como semillero y aprender mucho de lo que nos pueda enseñar la Fundación y la señora Rita”, manifestó Lindarys Martínez, una beneficiaria.

Este año con la estrategia de tener una reactivación económica con todos los protocolos de bioseguridad,  la tradicional ‘Cocina dulce’ se ubicó en la plaza Alfonso López y los parques de la ciudad, entre ellos, el Viajero, los Algarrobillos, Garupal, la Provincia y el parque de las Madres.

Un escenario perfecto para el disfrute de una de las mejores ferias gastronómicas de dulces en Valledupar, promotora de empleo, y estará toda la semana para el deleite de locales y turistas.

“Esta es una tradición que todos los vallenatos hemos tenido, desde pequeña mi mamá siempre hacía dulce para esta época y definitivamente Semana Santa sin dulce no es lo mismo, ojalá no se pierda nunca, por eso yo traigo a mi hijo siempre”, manifestó Arelis Suárez, clienta de la ruta del dulce.

Por Melissa Valle

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