El pasado 8 de junio, en la Biblioteca Departamental del Cesar, se inauguró la exposición fotográfica titulada “Restaura la vida”, un emotivo homenaje a las víctimas de ejecuciones extrajudiciales en la región. La muestra, compuesta por 16 fotografías, busca dignificar la memoria de Carlos Alberto Pumarejo, Adalberto Vázquez Torres, Ronal José Blanquicet, Evelio Vaca Pérez, Jaider del Carmen Valderrama Ruizdiaz, Rafael Serrana Martínez, Nelson Enrique Romo Romero, Alfredo Antonio Fernández Polo y Wilfrido Chantris.
Una reconstrucción para no olvidar
Uno de los momentos más conmovedores de la exposición es la fotografía ubicada en el ala izquierda del salón, que representa a Evelio Vaca Pérez. Dado que no existía una imagen de él en vida, se realizó una reconstrucción a partir de la memoria familiar y la colaboración de una ilustradora, con el fin de restaurar su rostro y su historia. Esta pieza, una pintura que simboliza la dignidad y la memoria viva, fue recibida con lágrimas por sus familiares.
Como explicó una de las coordinadoras del proceso restaurativo, “la foto restaurada nos movió profundamente. Fue un acto de amor y resistencia, porque darle rostro al dolor es también darle voz a quienes ya no están”.
Un relato visual y documental
Además de las fotografías, la exposición incluye recortes de periódicos con comunicados oficiales del Ejército Nacional que reportaban las bajas en combate, así como un mapa del departamento del Cesar que señala los lugares y fechas donde ocurrieron los asesinatos. Esta contextualización ayuda a comprender el alcance y la gravedad de los hechos, y a visibilizar la memoria territorial de la violencia.
El texto curatorial explica el sentido de la muestra: “No se trata solo de imágenes, sino de la ausencia que dejan quienes ya no están, y del amor que la violencia no pudo borrar. Cada fotografía es un acto silencioso de memoria y un llamado a la justicia y a la paz”.
Los familiares de las víctimas expresaron cómo enfrentarse a las imágenes, fue una experiencia intensa y dolorosa. “Ver el rostro de mi hermano después de tantos años fue un golpe al corazón, pero también un alivio porque su memoria sigue viva y dignificada”, comentó María Sofía Romero, vocera de los familiares.
Por su parte, un compareciente del Batallón La Popa afirmó: “No es fácil mirar estas imágenes, pero es nuestra responsabilidad reconocer el daño causado y comprometernos con la no repetición”.
Compromiso institucional y social
La exposición estará bajo la custodia de la asesora de paz de la Gobernación del Cesar, Juana Pacheco, y se tiene previsto que sea itinerante, para que pueda llegar a diferentes municipios y comunidades del departamento. Ana María Ferrer, coordinadora del grupo territorial Cesar de la Agencia para la Reincorporación y la Normalización (ARN), destacó la importancia de esta articulación: “La memoria es un pilar fundamental para la reconciliación y la reparación simbólica. Llevar esta galería a distintos rincones del Cesar es un compromiso para que no olvidemos y para que estos hechos no se repitan”.
La directora nacional de la ARN, Alejandra Villalobos, agregó: “La reparación no es solo económica, también es restaurativa. Este tipo de procesos contribuyen a sanar heridas y a construir un país más justo”.
El magistrado José Miller Hormiga, de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), resaltó que estos actos restaurativos son esenciales para la satisfacción simbólica de las víctimas y para fortalecer la justicia transicional. “Aunque aún falta el aporte individual de verdad por parte de algunos comparecientes, estas iniciativas permiten avanzar en la restauración y en el compromiso colectivo de no repetición”.
La exposición “Restaura la vida” permanecerá abierta al público todo el mes de julio y luego será trasladada a la Universidad Popular del Cesar, con una agenda conjunta para llegar a más comunidades. Es un espacio para mirar, reconocer y aprender, para que la memoria se convierta en un acto de justicia y esperanza.
Katlin Navarro Luna/ EL PILÓN
