En Arizona, barrio ubicado al noroccidente de Valledupar, no es ajeno a la molestia que generan los lotes enmontados que existen en diferentes sectores de la ciudad. A menudo, los habitantes deben lidiar con los malestares que les ocasiona el predio, localizado en la parte posterior del sector y que colinda con el conjunto cerrado Los Cañahuates.

Así lo expusieron varios miembros de la Junta de Acción Comunal, quienes aseguraron que este problema ha sido una constante desde hace más de 35 años, tiempo en el que nadie se ha hecho responsable del mantenimiento y adecuación de esos terrenos.

Con el pasar de los años el predio se ha convertido en madriguera de delincuentes y consumidores de sustancias alucinógenas, también en un botadero de basuras y otros elementos de los que se desprenden todo tipo de olores putrefactos.

“En 1992 con un grupo de amigos buscamos una solución que nos beneficiara a los moradores de Arizona y convertimos parte del predio en una cancha de futbol donde departíamos con nuestros vecinos. A pesar de que eso continúa ya no es la Junta quien dispone de esa cancha, sino particulares que llegan todos los fines de semana a realizar torneos de fútbol comerciales. Hasta allí todo va bien, la problemática se ve reflejada cuando ponen música con alto volumen y dejan el lugar lleno de basura; hasta fogones con sancochos montan allí”, manifestó el presidente de Junta de Acción Comunal, Alfredo Chinchía.

Por su parte Mónica Arzuaga aseguró que el lote se convirtió en la principal problemática de su comunidad.
“Esta ha sido nuestra problemática constante, yo llegué a Arizona hace 21 años y ese ha sido nuestro dolor de cabeza. Nosotros hemos venido trabajando hace rato sobre eso porque ahí se meten muchas personas a fumar vicio y a atracar. La inseguridad que se da en ese trayecto de la calle 6 penetra en todo el barrio y es promovido por esos lotes enmontados. Necesitamos con urgencia que la administración municipal haga que limpien o cerquen esos predios, o que el propietario venga a hacerse cargo de esta situación”
José Granadillo, otro habitante del sector, aseguró que al lugar son lanzados desechos provenientes de barrios cercanos y lo peor del caso es que cuando las basuras se acumulan, desconocidos le prenden fuego originando otro problema.

Además resaltó que la presencia de los lotes enmontados ha provocado el incremento de la delincuencia en la zona.