El temor sobre su seguridad e integridad acompaña a Rodrigo Tovar Pupo, alias Jorge 40, desde que regresó de Estados Unidos a Colombia. Por eso, el antiguo jefe paramilitar a través de una carta, que escribió antes de ser trasladado a la cárcel de Ibagué, le solicitó mayores garantías de protección al presidente de Colombia, Iván Duque.

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El exparamilitar adujo que haber pertenecido por muchos años a las extintas Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, lo hace blanco de represalias de distintos frentes en el país.

“Encontrándome ya en suelo patrio, es responsabilidad única y exclusiva del Estado colombiano en cabeza de usted Señor Presidente, garantizar la seguridad de mi familia y mía; por lo que de la manera más respetuosa, solicito cuando cumpla la cuarentena propia de quienes regresan a territorio colombiano, con ocasión de la pandemia del Covid-19, se ordene mi traslado a un centro de reclusión que brinde las garantías plenas para mi seguridad”, reza uno de los apartes del manuscrito.

A raíz de esto la Fiscalía habría tomado la decisión de trasladar a Tovar Pupo al Complejo Carcelario y Penitenciario de Ibagué, conocido como La Picaleña, por el barrio en que se encuentra.

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Este se caracteriza por ser uno de los más seguros del país, cuenta con acceso a servicios de cocina, calderas, lavandería, sanidad, taller de textiles, ebanistería, biblioteca y aulas de apoyo dentro del proceso de resocialización e inclusión laboral.

Sin embargo, ‘Jorge 40’ considera que sobre sus hombros recae una inminente amenaza y trae a colación el crimen que cometieron contra su hermano Sergio Tovar Pupo, en hechos ocurridos el 24 de diciembre de 2009 en un taller en el barrio Siete de Agosto de Valledupar.

Sergio Tovar era ingeniero de alimentos y no tenía problemas con la ley, por lo que aparentemente fue asesinado por enemigos de ‘Jorge 40’.

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“Tengo la certeza de que una vez pise una cárcel ordinaria en Colombia van a asesinarme. Le solicito, por medio de la presente se me recluya en un lugar que cuente con las medidas de seguridad necesarias, no solamente por tutelarme la vida, sino también por las víctimas que necesitan conocer la verdad de esta parte de la historia del conflicto que me corresponde”, acotó.