A partir del lamentable hecho nació un hermoso vallenato que combinó lírica en su composición, significado y una majestuosa interpretación.
La voz del fallecido cantante de música vallenata Diomedes Díaz inmortalizó una canción que en la actualidad aún le eriza la piel a más de un seguidor. ‘Sueños y vivencias’ de Efrén Calderón, ‘un gigante de la composición’, narró un triste episodio de su vida en la voz sentimental de ‘El cacique’.
Calderón, oriundo de San Juan del Cesar y perteneciente a una dinastía que lleva el vallenato en la sangre, llevaba una vida feliz, casado y con dos hijos. Sin embargo, su esposa, estando embarazada, falleció en un trágico accidente automovilístico.
A partir del lamentable hecho nació un hermoso vallenato que combinó lírica en su composición, significado y una majestuosa interpretación.
“Quién no sabe que es una partida
Solo vine a conocer la vida cuando se marchó
Se llevó un pedacito de mí, de adentro
Nos dejó su sonrisa inmortal, sentida
Cuando vine a entender el adiós
Fue cierto, se llevó su vida
…
Dímele a Dios que me ha dejado solo
Me ha quitado todo al llevarte a ti
No habrá en el mundo pa’ esconder mis ojos
Las veces que lloro porque te perdí”.
Luego de dos años, Efrén Calderón volvió a componer otra histórica canción titulada ‘Nace un cariño’, que también la grabó Diomedes Díaz en su álbum ‘Experiencias vividas’.
El compositor se volvió a enamorar y contrajo matrimonio con Liliana Margarita Ayola, la musa de dicha canción, la cual es claramente la continuación de ‘Sueños y vivencias’. Y aunque es para su nueva esposa, el autor dejó claro su continuo e inacabable dolor por la muerte de su primera esposa.
“Nace un cariño, un nuevo cielo
Otra luz que ilumina el camino de un triste sendero
Mi Dios ha visto mi sentimiento
Intenta cambiarme la vida
Dándome otro sueño
Yo sabía que tenía que seguir
Yo sabía que tenía que empezar
No podía someterme a sufrir
Sin saber cuándo era mi final”.
Cabe mencionar que Efrén Calderón es de los pocos compositores que tienen el lujo de decir que 5 de los grandes del vallenato le grabaron sus canciones: Jorge Oñate le grabó ‘Me pides tanto’; Los Betos, ‘La dama del ajedrez’; Los Zuleta, ‘Mira mi dios’: Rafael Orozco, ‘Qué será de mí’, y Diomedes Díaz, ‘Sueños y vivencias’.
A partir del lamentable hecho nació un hermoso vallenato que combinó lírica en su composición, significado y una majestuosa interpretación.
La voz del fallecido cantante de música vallenata Diomedes Díaz inmortalizó una canción que en la actualidad aún le eriza la piel a más de un seguidor. ‘Sueños y vivencias’ de Efrén Calderón, ‘un gigante de la composición’, narró un triste episodio de su vida en la voz sentimental de ‘El cacique’.
Calderón, oriundo de San Juan del Cesar y perteneciente a una dinastía que lleva el vallenato en la sangre, llevaba una vida feliz, casado y con dos hijos. Sin embargo, su esposa, estando embarazada, falleció en un trágico accidente automovilístico.
A partir del lamentable hecho nació un hermoso vallenato que combinó lírica en su composición, significado y una majestuosa interpretación.
“Quién no sabe que es una partida
Solo vine a conocer la vida cuando se marchó
Se llevó un pedacito de mí, de adentro
Nos dejó su sonrisa inmortal, sentida
Cuando vine a entender el adiós
Fue cierto, se llevó su vida
…
Dímele a Dios que me ha dejado solo
Me ha quitado todo al llevarte a ti
No habrá en el mundo pa’ esconder mis ojos
Las veces que lloro porque te perdí”.
Luego de dos años, Efrén Calderón volvió a componer otra histórica canción titulada ‘Nace un cariño’, que también la grabó Diomedes Díaz en su álbum ‘Experiencias vividas’.
El compositor se volvió a enamorar y contrajo matrimonio con Liliana Margarita Ayola, la musa de dicha canción, la cual es claramente la continuación de ‘Sueños y vivencias’. Y aunque es para su nueva esposa, el autor dejó claro su continuo e inacabable dolor por la muerte de su primera esposa.
“Nace un cariño, un nuevo cielo
Otra luz que ilumina el camino de un triste sendero
Mi Dios ha visto mi sentimiento
Intenta cambiarme la vida
Dándome otro sueño
Yo sabía que tenía que seguir
Yo sabía que tenía que empezar
No podía someterme a sufrir
Sin saber cuándo era mi final”.
Cabe mencionar que Efrén Calderón es de los pocos compositores que tienen el lujo de decir que 5 de los grandes del vallenato le grabaron sus canciones: Jorge Oñate le grabó ‘Me pides tanto’; Los Betos, ‘La dama del ajedrez’; Los Zuleta, ‘Mira mi dios’: Rafael Orozco, ‘Qué será de mí’, y Diomedes Díaz, ‘Sueños y vivencias’.