A pesar de haber estado por segunda vez en el tarjetón entre las opciones para elegir al próximo presidente de la república, el candidato Sergio Fajardo de la Coalición ‘Centro Esperanza’ no despegó con el electorado en el departamento del Cesar.  

En el país el candidato alternativo obtuvo un total de 888.051 votos, de los cuales 6.540 fueron aportados por los cesarenses, una votación que representó solamente el 1.51 % del potencial electoral que tenía la región que era de 870.264.  

La escasa votación se debió a que la coalición que lo representaba no ganó en ningún municipio del departamento, hazaña que sí logró el candidato Gustavo Petro del movimiento Pacto Histórico y Rodolfo Hernández, quienes salieron triunfadores en los comicios desarrollados este domingo. 

El politólogo y empresario Sergio Daza Quintero indicó que probablemente la derrota rotunda del político se debió a que en gran parte del electorado de los municipios del sur del departamento del Cesar lo acaparó Rodolfo Hernández.  

“Rodolfo Hernández quedó de segundo en el Cesar y creo que fue también por la influencia de Santander allá en el sur del departamento. Los santandereanos tienen una presencia importante entonces eso influyó mucho”, manifestó Daza Quintero, participante de la campaña del candidato. 

La teoría está sustentada en las estadísticas presentadas en el preconteo por la Registraduría Nacional debido a que en 10 de los 25 municipios del Cesar ganó el candidato Rodolfo Hernández, los cuales son La Paz (con 3.365 votos), Pailitas (3.849), Pelaya (5.110), La Gloria (2.380), Gamarra (2.979), Aguachica (22.288), Río de Oro (5.343), González (1.558), San Martín (6.982) y San Alberto (7.111); en los demás ganó Gustavo Petro.  

En algunas de estas regiones en el 2018 ganó Sergio Fajardo cuando logró en el departamento captar el apoyo de 29.021 ciudadanos que depositaron su voto en las urnas el 27 de mayo, en la primera vuelta. De ello, 12.869 fueron en Valledupar, seguido de Aguachica con 5.664, Codazzi con 1.269, San Alberto con 1.210, San Martín 1.166 y Río de Oro 1.017. Un panorama que deja ver que su capital en el Cesar lo tenía en el sur y que ahora se lo llevó Rodolfo Hernández. 

“Es una opción populista (Hernández) que empezó a quitarle espacio al centro y a las opciones alternativas, que era lo que Fajardo representaba, entonces estas dos cosas sucedieron: una el candidato no se pudo conectar con el electorado y la campaña no fue lo suficientemente moderna ni le pudo llegar de manera efectiva o eficaz a la gente”, puntualizó Daza Quintero. 

Contrario a lo que sí hizo el que ganó la segunda opción para ser elegido como presidente de la República de Colombia. Rodolfo Hernández centró su discurso político a difundirlo prioritariamente por las redes sociales como Facebook o Meta, Instagram, Twitter, Youtube y Tiktok, además eludió ir a más debates presidenciales.  

A esto se le suma que el movimiento político de Sergio Fajardo protagonizó al inicio de la campaña una división que también lo afectó, según indicaron los mismos integrantes del partido. 

“Para nadie es un secreto que desde los inicios la Coalición de la Esperanza presentó algunas dificultades internas que hicieron muy difícil el trámite de la coalición yo creo que eso influyó muchísimo en la primera etapa no hubo toda la unidad necesaria, se presentaron discrepancias y algunas situaciones que no favorecieron el trabajo final”, acotó Mariana Flórez, gerente administrativa del candidato Fajardo.  

Agregó que la personalidad del candidato tampoco encajó con el espíritu que caracteriza a la Costa Caribe debido a su tranquilidad. 

“Él no ha sido muy cercano a nuestro departamento realmente pocas veces vino por aquí, por otro lado, su temperamento es de una persona sosegada, tranquila, muy analítico, intelectual y muy poco dado a polarizar o hacer populismo. Nosotros en nuestra región Caribe no solamente aquí en Valledupar o el Cesar somos más de piel de cercanía, somos más explosivos somos más dicharacheros, nos importa muchísimo más las formas que el fondo, digamos que nos gusta mucho la expresión divaga; indudablemente Fajardo no es eso, es otra cosa, Fajardo es serenidad, la sensatez, el equilibrio, y pues uno tiende a acercarse o a unirse a quien más se parece a uno”, afirmó Flórez. 

Finalmente, consideró, que el voto que se evidenció en el país en los comicios del domingo fue en contra de la continuidad. 

“Por otro lado están las circunstancias de la ciudadanía del país que está disgustada, dolida, el país está aporreado y había una actitud fuerte de rebeldía y de rabia, y que es perfectamente entendible porque desafortunadamente a este gobierno las cosas no le salieron bien”, finalizó Flórez. 

Por Marllelys Salinas / EL PILÓN  

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