La jornada del 25 de septiembre dejó en evidencia la grave situación de violencia contra la mujer en Valledupar. En hechos aislados, la Policía Metropolitana reportó la captura de dos hombres señalados de agredir a sus parejas en distintos puntos de la ciudad, situaciones que se suman al reciente caso de tentativa de feminicidio ocurrido en el conjunto residencial Acqua, donde un ciudadano disparó contra su compañera sentimental.
El primer procedimiento se registró en la carrera 13A con calle 14 del barrio Obrero, donde uniformados atendieron el llamado de la comunidad por un caso de agresión dentro de una vivienda. Allí fue detenido Sergio Daniel Amariz Díaz, de 27 años, luego de atacar físicamente a su compañera sentimental, una mujer de 26 años. El capturado fue dejado a disposición de la Fiscalía General de la Nación por el delito de violencia intrafamiliar.
Horas más tarde, en la carrera 18E con calle 31 del barrio Primero de Mayo, la patrulla sorprendió en flagrancia a Royman René Rincones Márquez cuando intentaba golpear con una tabla a su expareja sentimental.
La víctima denunció que el hombre, además de la agresión, la había obligado a sostener relaciones sexuales en contra de su voluntad. Según su testimonio, ya existía una denuncia previa por constreñimiento interpuesta el pasado 25 de agosto. Gracias a la intervención de los uniformados, el ataque no pasó a mayores y el capturado fue puesto a disposición de la Fiscalía para responder por los delitos de constreñimiento y violencia intrafamiliar.
Estos hechos se suman al caso que conmocionó a la ciudad en el conjunto Acqua, donde Eriberto Enrique Gutiérrez Díaz, de 63 años, fue capturado tras dispararle en dos ocasiones a su pareja, quien permanece fuera de peligro. En este caso, también se conoció que la víctima había denunciado previamente a su agresor por maltrato.
La Policía Metropolitana de Valledupar reiteró su compromiso en la lucha contra la violencia intrafamiliar e invitó a la ciudadanía a denunciar cualquier hecho que ponga en riesgo la vida e integridad de las mujeres a través de la línea púrpura 155, el 123 de la Policía Nacional o los cuadrantes de vigilancia.
Estos tres casos, ocurridos en menos de 24 horas, reflejan el aumento de las agresiones contra mujeres en la capital del Cesar y reafirman la necesidad de fortalecer las medidas de prevención y protección para las víctimas de violencia de género.
Redacción judicial / EL PILÓN










