Con poco espacio en el equipo titular y luego de superar lesiones, problemas personales y dejar de lado algunas licencias, el volante colombiano James Rodríguez volvió a jugar con Real Madrid y lo hizo en la Supercopa de España, que se disputa en Arabia.

El futbolista colombiano ingresó al minuto 77 en reemplazo del croata Luka Modric, uno de los buenos jugadores que tuvo el duelo contra Valencia disputado en Yeda.

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Rodríguez no ha tenido una temporada favorable y los números así lo comprueban: 341 minutos en cancha por La Liga y 81 minutos por Champions League, reflejan un pobre registro para la temporada del mediocampista, quien no ha logrado convencer a Zidane en ninguno de los dos pasos del francés por el banco merengue, siendo esta la segunda oportunidad en la que el técnico se encuentra con el jugador colombiano.

El último partido que James había disputado con Real Madrid fue el encuentro que disputó el equipo blanco contra Galatasaray por la Champions League, duelo que concluyó con marcador de 0-1 a favor de los de la capital española y en el que James disputó los últimos once minutos de juego, pudiendo participar muy poco en las acciones de gol y mostrando que se encontraba, un poco, fuera de ritmo.

Previamente, James había jugado todo el partido contra Mallorca, un encuentro en el que Real Madrid cayó por la mínima diferencia y en el que el jugador colombiano fue uno de los focos de las críticas de la prensa española, considerando su bajo rendimiento, dado el poco aporte que tuvo en su equipo y la falta de trascendencia en un juego frente a un rival menor.

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Por otro lado, el Real Madrid logró la victoria abriendo el marcador con un gol olímpico del volante germano Tonny Cross, quien remató desde el tiro de esquina ante un distraido portero que pese a meter los puños no pudo evitar que la pelota se metiera al fondo de la portería.

Los otros dos goles fueron obras de MIsco y Modric, mientras que para el equipo ‘che’ descontó Danny Parejo sobre el tiempo añadido (90+2) desde el punto blanco del penalti.

Así las cosas, James jugó 13 minutos luego de alternar su lugar entre el banco de sustitutos y lesiones constantes.