Un terremoto de magnitud 7,0, con 30 segundos de duración, sacudió a toda la isla griega de Samos el mediodía de este viernes, hora europea, extendiéndose incluso hasta Turquía con una magnitud de 6,8. A su paso, el terremoto destruyó edificios y casas en ambos países.

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En el caso de Turquía, hasta el momento se registran cuatro muertos y 120 heridos. Además, al menos diez edificios se han derrumbado en el barrio de Bayrakli, según ha informado la emisora NTV.

“Hay edificios que se han derrumbado, pero por ahora no podemos hablar de heridos o muertos. Lo estamos investigando”, confirmó a Efe una funcionaria del ayuntamiento de Esmirna.

“Nuestro edificio en Bayraklı se ha derrumbado. Logré salir en el último momento con mi hijo y sacamos a una anciana de los escombros, pero muchas más personas quedaron bajo los escombros. Dimos el paso en el último momento. El edificio se agrietó y se derrumbó. Nuestro edificio tenía ocho pisos y mi lugar de trabajo estaba en la parte inferior. Todos los apartamentos del edificio de al lado que se ha derrumbado también estaban llenos“, explicó Zeki Soysal, un ciudadano de Esmirna, a CNN.

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Protección Civil griega ha enviado un aviso de un posible tsunami a través del servicio de urgencias 112 y el gobierno regional del Egeo del Norte ha pedido a los vecinos que eviten circular en las carreteras paralelas al mar, ya que el terremoto ha tenido una profundidad focal de 10 kilómetros.