Fuentes de la Décima Brigada confirmaron que el material bélico decomisado a la guerrilla presuntamente sería utilizado para adelantar acciones terroristas en contra de la Fuerza Pública
Una serie de atentados criminales en contra de las autoridades militares, policivas e incluso la población civil, frustró el Ejército al desmantelar un depósito con material de guerra enterrado a 70 centímetros de profundidad perteneciente al ELN en un sendero del corregimiento de La Victoria de San Isidro, municipio de La Jagua de Ibirico.
Durante la operación adelantada por tropas del Batallón Especial, Energético y Vial Número 2 en coordinación con miembros de la Sijín de la Policía, hallaron 8 proveedores calibre 5.56 milímetros, 100 cartuchos calibre 5.56, 5 granadas de mano IM-26, un radio base, dos radios comunicadores, una bandera, brazaletes alusivos al ELN y uniformes de uso exclusivo de las fuerzas militares.
Fuentes de la Décima Brigada confirmaron que el material bélico decomisado a la guerrilla presuntamente sería utilizado para adelantar acciones terroristas en contra de la Fuerza Pública y de los activos estratégicos de la región en su paso obligado en la lucha contra esa estructura criminal.
Fuentes de la Décima Brigada confirmaron que el material bélico decomisado a la guerrilla presuntamente sería utilizado para adelantar acciones terroristas en contra de la Fuerza Pública
Una serie de atentados criminales en contra de las autoridades militares, policivas e incluso la población civil, frustró el Ejército al desmantelar un depósito con material de guerra enterrado a 70 centímetros de profundidad perteneciente al ELN en un sendero del corregimiento de La Victoria de San Isidro, municipio de La Jagua de Ibirico.
Durante la operación adelantada por tropas del Batallón Especial, Energético y Vial Número 2 en coordinación con miembros de la Sijín de la Policía, hallaron 8 proveedores calibre 5.56 milímetros, 100 cartuchos calibre 5.56, 5 granadas de mano IM-26, un radio base, dos radios comunicadores, una bandera, brazaletes alusivos al ELN y uniformes de uso exclusivo de las fuerzas militares.
Fuentes de la Décima Brigada confirmaron que el material bélico decomisado a la guerrilla presuntamente sería utilizado para adelantar acciones terroristas en contra de la Fuerza Pública y de los activos estratégicos de la región en su paso obligado en la lucha contra esa estructura criminal.