El rey vallenato 2012 cumple este 7 de agosto 36 años de edad.
Al celebrar este sábado 7 de agosto su cumpleaños número 36, el rey vallenato Fernando Rangel Molina retrocedió en el tiempo para recordar sus inicios en la música vallenata, los logros obtenidos en su carrera y su inolvidable unión musical con el ‘Jilguero de América’, Jorge Oñate.
Aunque en un principio sus padres lo inscribieron cuando niño en cursos de pintura, natación y fútbol, fueron las notas del acordeón las que lograron llamar su atención, convirtiéndose en poco tiempo en uno de los acordeoneros de Los Niños del Vallenato.
“Mis papás siempre me metieron a cursos de todo: pintura, fútbol y natación, pero nada me gustaba. Entonces, en Bellas Artes, justamente al frente donde estaba recibiendo el curso de pintura, quedaba el curso de acordeón del maestro Andrés ‘El Turco’ Gil y enseguida me interesó ese instrumento, siendo él la persona que me enseñó a tocar el acordeón”, expresó Rangel.
En su hoja de vida también destaca su paso por la agrupación La Gente Omar Geles, visitando Estados Unidos, Canadá, México, Aruba, entre otros países; así como sus uniones musicales con José Darío Orozco, ‘Pillao’ Rodríguez, Kbeto Zuleta y Jorge Oñate, a quien recuerda con cariño y agradecimiento por las enseñanzas que le dejó en su carrera musical.
“Fueron cuatro años que estuve con el maestro (Jorge Oñate) y su apoyo cuando gané el Festival Vallenato fue fundamental. Además de eso lo más importante que aprendí de él fue el tesón y las ganas de echar para adelante. A pesar de su edad siempre quería tener los mejores músicos, luchaba por dar lo mejor en sus presentaciones y vivía preocupado por su música”, recordó.
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Añadió que cuando se coronó rey profesional del Festival de la Leyenda Vallenata en el 2012, la noche de la final el maestro no pudo acompañarlo, ya que tenía una presentación en Barranquilla, pero que una vez llegó a Valledupar lo llamó para celebrar por lo grande su primer puesto.
“Ese día teníamos una presentación en Barranquilla y como yo estaba presentándome en el Festival no pude estar y me reemplazó otro acordeonero. Cuando gané (Jorge Oñate) me llamó y me dijo que lo esperara en mi casa para que no los ‘pegáramos’. Llegó tipo 6:00 de la mañana y duramos como un día tomando, fue un día muy feliz en mi casa”, contó.
Para Fernando Rangel el 2012 es sinónimos de alegrías y define ese año como uno de los mejores en su vida, ya que pudo conquistar el trofeo de rey vallenato profesional después de cinco intentos, lanzó el álbum El Chacho de la Película con el ‘Jilguero’, del que se desprenden canciones como ‘Descarga de besos’, ‘Novia eterna’ y ‘Cuando hay amor’; y, lo más importante, nació su hija María Fernanda.
La corona del 2012 en el Festival de la Leyenda Vallenata no es la única que ostenta el acordeonero. En el 2004 obtuvo el primer lugar en la categoría Juvenil y años más tarde también se consagró rey en festivales en Barrancabermeja, Chinú, Nobsa, Sahagún, entre otros.
En diciembre pasado protagonizó una de las polémicas más sonadas en los últimos años en la farándula vallenata al criticar la carátula del álbum Las Locuras Mías de Silvestre Dangond por excluir a su antiguo acordeonero Lucas Dangond, desencadenando una ‘ola’ de comentarios a favor y en contra de su posición.
Rangel ha dicho en repetidas ocasiones que luchará incansablemente por rescatar la figura del acordeonero en la música vallenata, por lo que en octubre de este año lanzará un álbum en el que interpreta y toca cada una de sus canciones. Antes había lanzado los sencillos ‘Confía en mí’ y ‘Una infinita ilusión’, en el que demuestra su talento como cantante y acordeonero, emulando a los juglares como Alejandro Durán, Luis Enrique Martínez y Emiliano Zuleta, entre otros.
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“Son siete canciones en donde canto y toco el acordeón como lo hacían los grandes juglares porque la idea es rescatar la presencia del acordeonero como artista principal”, explicó.
También anunció que en diciembre de este año empezará su preparación para la contienda del Festival de la Leyenda Vallenata, versión rey de reyes, que se realizará en el 2022 en homenaje a Jorge Oñate.
Fernando además de ser acordeonero es economista de profesión, por lo que exhorta a los nuevos talentos a que estudien y cada día amen más su instrumento.
“Pienso que la música te da muchas alegrías y momentos muy buenos, pero es variante, unas veces estás tocando y otras no, entonces siempre me he caracterizado por ejercer mis dos carreras y en noviembre me graduó como especialista en Derechos Humanos”, dijo.
Concluyó diciendo: “A los nuevos talentos les digo que estudien y que no se inclinen solo por la música, que traten de llevar dos profesiones y que ensayen mucho porque el acordeón es un instrumento de mucho ensayo y a tocar el vallenato tradicional porque como vallenatos no podemos perder nuestra esencia”.
POR: CARMEN LUCÍA MENDOZA CUELLO/ EL PILÓN
El rey vallenato 2012 cumple este 7 de agosto 36 años de edad.
Al celebrar este sábado 7 de agosto su cumpleaños número 36, el rey vallenato Fernando Rangel Molina retrocedió en el tiempo para recordar sus inicios en la música vallenata, los logros obtenidos en su carrera y su inolvidable unión musical con el ‘Jilguero de América’, Jorge Oñate.
Aunque en un principio sus padres lo inscribieron cuando niño en cursos de pintura, natación y fútbol, fueron las notas del acordeón las que lograron llamar su atención, convirtiéndose en poco tiempo en uno de los acordeoneros de Los Niños del Vallenato.
“Mis papás siempre me metieron a cursos de todo: pintura, fútbol y natación, pero nada me gustaba. Entonces, en Bellas Artes, justamente al frente donde estaba recibiendo el curso de pintura, quedaba el curso de acordeón del maestro Andrés ‘El Turco’ Gil y enseguida me interesó ese instrumento, siendo él la persona que me enseñó a tocar el acordeón”, expresó Rangel.
En su hoja de vida también destaca su paso por la agrupación La Gente Omar Geles, visitando Estados Unidos, Canadá, México, Aruba, entre otros países; así como sus uniones musicales con José Darío Orozco, ‘Pillao’ Rodríguez, Kbeto Zuleta y Jorge Oñate, a quien recuerda con cariño y agradecimiento por las enseñanzas que le dejó en su carrera musical.
“Fueron cuatro años que estuve con el maestro (Jorge Oñate) y su apoyo cuando gané el Festival Vallenato fue fundamental. Además de eso lo más importante que aprendí de él fue el tesón y las ganas de echar para adelante. A pesar de su edad siempre quería tener los mejores músicos, luchaba por dar lo mejor en sus presentaciones y vivía preocupado por su música”, recordó.
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Añadió que cuando se coronó rey profesional del Festival de la Leyenda Vallenata en el 2012, la noche de la final el maestro no pudo acompañarlo, ya que tenía una presentación en Barranquilla, pero que una vez llegó a Valledupar lo llamó para celebrar por lo grande su primer puesto.
“Ese día teníamos una presentación en Barranquilla y como yo estaba presentándome en el Festival no pude estar y me reemplazó otro acordeonero. Cuando gané (Jorge Oñate) me llamó y me dijo que lo esperara en mi casa para que no los ‘pegáramos’. Llegó tipo 6:00 de la mañana y duramos como un día tomando, fue un día muy feliz en mi casa”, contó.
Para Fernando Rangel el 2012 es sinónimos de alegrías y define ese año como uno de los mejores en su vida, ya que pudo conquistar el trofeo de rey vallenato profesional después de cinco intentos, lanzó el álbum El Chacho de la Película con el ‘Jilguero’, del que se desprenden canciones como ‘Descarga de besos’, ‘Novia eterna’ y ‘Cuando hay amor’; y, lo más importante, nació su hija María Fernanda.
La corona del 2012 en el Festival de la Leyenda Vallenata no es la única que ostenta el acordeonero. En el 2004 obtuvo el primer lugar en la categoría Juvenil y años más tarde también se consagró rey en festivales en Barrancabermeja, Chinú, Nobsa, Sahagún, entre otros.
En diciembre pasado protagonizó una de las polémicas más sonadas en los últimos años en la farándula vallenata al criticar la carátula del álbum Las Locuras Mías de Silvestre Dangond por excluir a su antiguo acordeonero Lucas Dangond, desencadenando una ‘ola’ de comentarios a favor y en contra de su posición.
Rangel ha dicho en repetidas ocasiones que luchará incansablemente por rescatar la figura del acordeonero en la música vallenata, por lo que en octubre de este año lanzará un álbum en el que interpreta y toca cada una de sus canciones. Antes había lanzado los sencillos ‘Confía en mí’ y ‘Una infinita ilusión’, en el que demuestra su talento como cantante y acordeonero, emulando a los juglares como Alejandro Durán, Luis Enrique Martínez y Emiliano Zuleta, entre otros.
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“Son siete canciones en donde canto y toco el acordeón como lo hacían los grandes juglares porque la idea es rescatar la presencia del acordeonero como artista principal”, explicó.
También anunció que en diciembre de este año empezará su preparación para la contienda del Festival de la Leyenda Vallenata, versión rey de reyes, que se realizará en el 2022 en homenaje a Jorge Oñate.
Fernando además de ser acordeonero es economista de profesión, por lo que exhorta a los nuevos talentos a que estudien y cada día amen más su instrumento.
“Pienso que la música te da muchas alegrías y momentos muy buenos, pero es variante, unas veces estás tocando y otras no, entonces siempre me he caracterizado por ejercer mis dos carreras y en noviembre me graduó como especialista en Derechos Humanos”, dijo.
Concluyó diciendo: “A los nuevos talentos les digo que estudien y que no se inclinen solo por la música, que traten de llevar dos profesiones y que ensayen mucho porque el acordeón es un instrumento de mucho ensayo y a tocar el vallenato tradicional porque como vallenatos no podemos perder nuestra esencia”.
POR: CARMEN LUCÍA MENDOZA CUELLO/ EL PILÓN