Por Abdel Martínez Pérez
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Las comunidades residentes en más de 50 casas del asentamiento de alto riesgo, Esperanza Oriente, localizado en la margen derecha del río Guatapurí, están desesperados ante el incumplimiento del gobierno local de llevar a cabo su reubicación en las viviendas construidas para tal fin  en el barrio ‘El Edén’, ubicado en la parte posterior de Mercabastos.

La mayoría de sus habitantes se ganan la vida de cualquier manera, ya sea del rebusque o de la venta de chatarras; aunque otros lo hagan de la venta de drogas  y de otras actividades ilícitas; pero todos viven en la más extrema pobreza, hasta el punto de carecer de los servicios básicos. Por ejemplo, del único servicio público que gozan, es el de la energía, suministrado por una empresa privada, porque el sector oficial no puede invertir allí, al ser catalogada zona de alto riesgo.

Las familias allí asentadas, como ya se dijo, viven en extrema pobreza, tanto que el único servicio que tienen, les es suspendido por no tener recursos para cancelar el recibo de consumo que llega por poca cuantía.

Sin embargo, el Gobierno Municipal anunció que  parte de esas comunidades ya fueron notificadas para que salgan de allí, en tanto que otras están a la espera de la elaboración del censo, para legalizar su reubicación. En esa zona de reserva forestal, será construido un gran parque ecológico.

Puntos de vista

Luis Antonio Castrillón, presidente junta comunal. "Lo único que queremos, es que  el gobierno local, se acuerde de nosotros con la reubicación".

Javier Bovea, residente. "Tenemos muchas necesidades, pero las autoridades nos tienen en el completo olvido".