En su debut el prometedor mediocampista de 18 años saltó al campo del Atanasio Girardot con un inusual estilo de cabello.
El pasado jueves 19 de septiembre se llevó a cabo el juego entre Atlético Nacional y Alianza FC, compromiso de vuelta por la serie de octavos de final de la Copa Betplay Dimayor. El encuentro terminó con un 2-1 a favor del cuadro antioqueño que le dio el pase a la siguiente ronda.
Sin embargo, no todo lo llamativo de este encuentro fue futbolístico, ya que otro hecho captó la atención de propios y extraños: el curioso corte de cabello del joven debutante verdolaga Elkin Rivero.
En su debut, el prometedor mediocampista de 18 años saltó al campo del Atanasio Girardot con un inusual estilo de cabello, muy similar a ‘la tonsura’, que consiste en afeitar el cabello alrededor de la coronilla, corte característico de los frailes devotos a la Iglesia católica en la época medieval, algo impropio de estos tiempos. Pero ¿qué motivó a Elkin Rivero a usar este extraño corte?
Este no se trata de un caso aislado, sino de una tradición presente en distintos clubes del continente, que se trata de un “bautizo” a los jóvenes previo a su debut profesional, en la que los muchachos son sometidos a lucir extravagantes estilos de cabello, a manos de sus compañeros más experimentados.
Los orígenes de esta costumbre se encuentran en las tradiciones de los militares, en las cuales se corta completamente el cabello de los nuevos que ingresan al ejército, demostrando simbólicamente su compromiso y voluntad de formar parte.
Este no es el único rito con el que dan la bienvenida a los jóvenes. Otras novatadas populares son: pagar la primera cena con el equipo, inmovilizar a los novatos mientras el resto les arroja cosas o tener que interpretar una canción en la cena delante de todo el plantel.
Para los jóvenes el hecho de cortar su cabello es casi irrelevante en comparación a la alegría que significa poder empezar a escribir su historia como deportistas profesionales.
Por: Alfredo José García Betancourt*
*Practicante de Areandina
En su debut el prometedor mediocampista de 18 años saltó al campo del Atanasio Girardot con un inusual estilo de cabello.
El pasado jueves 19 de septiembre se llevó a cabo el juego entre Atlético Nacional y Alianza FC, compromiso de vuelta por la serie de octavos de final de la Copa Betplay Dimayor. El encuentro terminó con un 2-1 a favor del cuadro antioqueño que le dio el pase a la siguiente ronda.
Sin embargo, no todo lo llamativo de este encuentro fue futbolístico, ya que otro hecho captó la atención de propios y extraños: el curioso corte de cabello del joven debutante verdolaga Elkin Rivero.
En su debut, el prometedor mediocampista de 18 años saltó al campo del Atanasio Girardot con un inusual estilo de cabello, muy similar a ‘la tonsura’, que consiste en afeitar el cabello alrededor de la coronilla, corte característico de los frailes devotos a la Iglesia católica en la época medieval, algo impropio de estos tiempos. Pero ¿qué motivó a Elkin Rivero a usar este extraño corte?
Este no se trata de un caso aislado, sino de una tradición presente en distintos clubes del continente, que se trata de un “bautizo” a los jóvenes previo a su debut profesional, en la que los muchachos son sometidos a lucir extravagantes estilos de cabello, a manos de sus compañeros más experimentados.
Los orígenes de esta costumbre se encuentran en las tradiciones de los militares, en las cuales se corta completamente el cabello de los nuevos que ingresan al ejército, demostrando simbólicamente su compromiso y voluntad de formar parte.
Este no es el único rito con el que dan la bienvenida a los jóvenes. Otras novatadas populares son: pagar la primera cena con el equipo, inmovilizar a los novatos mientras el resto les arroja cosas o tener que interpretar una canción en la cena delante de todo el plantel.
Para los jóvenes el hecho de cortar su cabello es casi irrelevante en comparación a la alegría que significa poder empezar a escribir su historia como deportistas profesionales.
Por: Alfredo José García Betancourt*
*Practicante de Areandina