La falta de planificación, educación, información y demás, son algunos de los factores que ‘permiten’ posicionar al departamento del Cesar en el podio de los embarazos no deseados en adolescentes, por lo que las autoridades, entidades y empresas competentes tratan de poner su ‘granito de arena’ para mitigar estas cifras.

El gerente de la regional norte de Profamilia, Jhonatan Vargas Laverde, acotó que, según cifras del Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas, DANE, el Cesar tiene uno de los indicadores más altos en embarazos adolescentes no deseados. “En el año 2020 estaba casi 4 puntos por encima de los promedios nacionales y dentro la región Caribe, que también es una de las más golpeadas con estas cifras, el Cesar estaba por encima de departamentos como Atlántico”.

Así el panorama, en Valledupar desde el 2018 se ha venido evidenciando un incremento en los casos de adolescentes embarazadas, en su mayoría, las que oscilan entre los 12 y 19 años de edad, mismas que según expertos no tienen la madurez física ni emocional para enfrentar esta etapa. 

De igual manera, este factor, de acuerdo a Camilo Andrés Muñoz, gerente de Educación y Juventud de Profamilia, va milimétricamente ligado a los índices de pobreza. “Cerca del 80 % de las mujeres que quedan en embarazos no deseados se retiran de sus estudios y eso hace que la espiral de la pobreza no se rompa. También hay una estadística que manifiesta que hay una gran probabilidad de que las mujeres adolescentes que quedaron embarazadas bajo esas condiciones vuelvan a quedar en ese estado”, expresó.

EDUCACIÓN SIN TABÚ, IMPORTANTE PARA PREVENIR LOS EMBARAZOS

Para nadie es un secreto que la sexualidad sigue siendo un tema tabú en la sociedad, específicamente en los hogares, en donde los padres, en algunos casos, prefieren omitir el tema, lo que ‘obliga’ a los adolescentes y jóvenes a aprender e investigar solos sobre sexualidad. 

“No se puede tapar el sol con un dedo, la sexualidad y la pornografía están en todas partes, si nosotros no les hablamos de esto a nuestros hijos la pornografía lo hará y es mejor que seamos nosotros como cuidadores que les brindemos toda la información”, dijo Muñoz.

En ese sentido, y entendiendo que la educación es un complemento a todos los servicios de salud, Profamilia reabrió sus puertas en Valledupar en aras de ayudar a mitigar las cifras de embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual que hay en la ciudad y el departamento. 

“Esperamos ayudar a todas las personas a través de servicios seguros y confiables que no solo vamos a prestar en la clínica ubicada en la Unidad Médica Las Flores, en el edificio de Sanitas, sino también mediante brigadas extramurales que han sido nuestro sello durante estos 57 años. En nuestra nueva sede tenemos servicios especializados en salud sexual y reproductiva, asesorías en planificación familiar, ginecología, ecografía, citología, pruebas de detección del virus de papiloma humano, y demás”, puntualizó el gerente regional norte.

Ketty Jannith Gutiérrez Maestre/EL PILÓN 

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