A pesar de las innumerables quejas, no hubo respuesta
Con tristeza, indignación y rabia, ven los habitantes de un sector del barrio La Castellana, ubicado al noroccidente de Valledupar, cómo se acaba el año y no fue posible que ni la Administración Municipal ni los directivos del colegio Loperena La Esperanza, y ni los propietarios de los lotes enmontados que están en el sector, los limpiaran no sólo para cambiarle el aspecto al sector, sino para evitar la proliferación de mosquitos y otros insectos que son nocivos para la salud de las personas.
Los vecinos de la carrera 38 entre carreras 4 y 5D, denunciaron que el lote ubicado a un costado del colegio Loperena La Esperanza, lo han convertido en un basurero público, donde los carromuleros y vecinos de otros sectores tiran toda clase de escombros, desechos vegetales, basuras y animales muertos, lo que está contaminando el medio ambiente del sector.
El lote enmontado, además de ser un foco de contaminación y un basurero a cielo abierto, es un criadero de mosquitos, serpientes y otros animales ponzoñosos, lo que los tiene preocupados porque en el barrio se han registrado casos de dengue.
También le dijeron a EL PILÓN, que los trabajos que viene adelantando la empresa Emdupar para solucionar la problemática que tienen con el rebosamiento de aguas negras, está generando olores fétidos que invaden las viviendas sobre todo en horas de la noche, por lo que temen que las enfermedades e infecciones ataquen a los niños.
Opinión de los vecinos
Los moradores del barrio que viven frente al colegio Loperena La Esperanza, no saben qué hacer para que les limpien el lote enmontado que está a un costado de la institución educativa y que se ha convertido para ellos en un dolor de cabeza.
Luis Carlos Molina
“Este lote siempre es un problema para nosotros, porque la gente aprovecha este espacio para tirar basuras, cometer ilícitos y hasta para consumir drogas, lo que se convierte en un peligro para todos los que vivimos por aquí. En las noches no aguantamos la mosquitera, ni los olores y la contaminación que generan los animales muertos que tiran ahí. Además en las noches se nos mete en las casas ese olor repugnante que sale de la zanja que hizo Emdupar para solucionar el problema del derramamiento de aguas negras que se registró meses atrás en el sector. Lo más grave de esto, es que uno no le puede decir nada a la gente que bota la basura en ese lote, porque lo rellenan a uno con groserías y le contestan con tres piedras en las manos”.
Edith Morales
“La verdad es que no hallamos qué hacer con este lote, porque como ustedes pueden ver es un basurero, y ahora, para colmo de males, tenemos que aguantarnos el olor a alcantarilla que nos invade las casas, porque Emdupar comenzó unos trabajos y no los ha terminado. Queremos que nos limpien el lote, pero también queremos que Emdupar termine rápido los trabajos porque nos puede generar problemas de salubridad. Aquí los malandros, drogadictos, los mosquitos y las culebras están a la orden del día, lo triste es que se acabó el año y nada que nos solucionaron este problema”.
