El desempleo en Valledupar cayó del 12 % al 7,8 % entre mayo de 2024 y el mismo periodo de 2025, disminución impulsada por el crecimiento de trabajadores por cuenta propia, que solo en un año pasó de 82.512 a 89.000, según los datos del mercado laboral reportados por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE).
“Lo que más está aumentando son los cuentapropistas. Personas que trabajan de forma independiente, muchas veces sin prestaciones ni estabilidad laboral”, explicó Fernando Herrera, director del Centro de Estudios Socioeconómicos Regionales (Cesore), sobre los famosos emprendedores o personas que se rebuscan al no conseguir empleo.
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Para entender la magnitud de este grupo, hay que recordar que en Valledupar hay 196.334 personas trabajando. De ellos, el 45,3 % lo hacen por cuenta propia, casi la mitad de los ocupados. Desde su experiencia como economista, Herrera reconoce el esfuerzo de quienes generan su propio sustento, pero advierte que se trata de “trabajos poco productivos y sin protección social”; es decir, la mayoría hacen parte de la informalidad, que en la capital cesarense es del 63,6 %, la tercera tasa más alta del país.
Trabajadores particulares
Otro grupo que creció respecto al año anterior fue el de los trabajadores particulares, pasando de 78.000 a 84.000 personas, una diferencia positiva de 6.000 ocupados en esta modalidad que el DANE incluye dentro de la población informal. “Los empleados particulares y los obreros que laboran en establecimientos, negocios o empresas que ocupen hasta cinco personas en todas sus agencias y sucursales, incluyendo al patrono y/o socio”, define la entidad.
El jornalero o peón, es decir, las personas que trabajan por un pago por el día laborado, también tuvo un leve incremento: de 250 que la entidad estadística había reportado, ahora hay por lo menos 570 en esta modalidad. Desde Cesore insistieron en fortalecer la educación técnica y tecnológica en áreas que realmente respondan a las demandas de los sectores productivos, haciendo uso eficiente de los recursos públicos desde los gobiernos locales, especialmente del dinero proveniente de las regalías del carbón. “Que no inviertan en egos o en obras faraónicas, sino en lo que realmente necesita la gente. Y, sobre todo, que no se roben la plata”, expresó el director.
Por actividades económicas
El crecimiento total de trabajadores fue de 9.170 en un año. El sector con más personas sigue siendo el comercio, con 45.000 ocupados, seguido de la administración pública (33.332 personas), actividades artísticas y de entretenimiento (33.000), y transporte y almacenamiento (21.150).
Precisamente el sector comercio fue el que más creció, puesto que hace un año tenía unos 39.000 trabajadores; le siguió el transporte y almacenamiento, que antes tenía 20.000 personas, y la construcción, que pasó de 16.000 a 17.000 trabajadores. En este último caso, Herrera considera que se debe al movimiento de las obras públicas en la ciudad y la región.
Por Andrea Guerra Peña / EL PILÓN
