El sicario que mató a un exinstructor de Minería en el SENA de Valledupar, declaró contra el autor intelectual del crimen.
“Pague su homicidio que yo pago el mío”, así le dijo Alex Miguel Montero Sarmiento a Rufino Aguilar Alvear; este último detenido el pasado mes de septiembre, como autor intelectual del asesinato de uno de sus socios en el negocio de legalización de títulos para explotación de yacimientos de minerales.
Aunque Aguilar Alvear, insiste en su inocencia por el delito de homicidio, tiene en su contra a Montero Sarmiento, sicario que delinquía en Cesar y Guajira, quien confesó ayer bajo juramento que, por orden de Aguilar, mató a Miguel Antonio Alvarado Pedrozo, en crimen ocurrido el 2 de abril de 2009, en el barrio Santa Rosa de Valledupar
"No me dijeron en realidad lo que hacia el señor, yo no averigüé, yo solamente pasé del negocio a los hechos", manifestó el sicario, ante el Juzgado Cuarto Penal del Circuito de Valledupar.
Disputa fatal
La víctima fue instructor de Minería en el SENA y, para la época de su muerte, era socio de Rufino Aguilar y negociaban títulos mineros en Magdalena. EL PILÓN conoció que la teoría del caso que maneja la Fiscalía, está relacionada con la disputa que existía entre los socios por la venta de unos terrenos.
“Déjeme decirle señor Rufino, la justicia llega porque llega”, advirtió el testigo antes de salir de la sala de audiencias en el cuarto piso del Palacio de Justicia de Valledupar.
Minutos después, Montero Sarmiento fue trasladado por un grupo especial del INPEC a la cárcel de Cómbita, Boyacá, donde paga una condena por el asesinato de los hermanos Fabio Fidel y Francisco Javier Carrascal, asesinados el 3 de julio de 2009, en San Juan del Cesar, La Guajira.
Al cierre de esta edición, otros testigos declaraban en el juicio oral contra Rufino Aguilar Alvear, quien se encuentra detenido en la Cárcel Judicial de Valledupar.
El sicario que mató a un exinstructor de Minería en el SENA de Valledupar, declaró contra el autor intelectual del crimen.
“Pague su homicidio que yo pago el mío”, así le dijo Alex Miguel Montero Sarmiento a Rufino Aguilar Alvear; este último detenido el pasado mes de septiembre, como autor intelectual del asesinato de uno de sus socios en el negocio de legalización de títulos para explotación de yacimientos de minerales.
Aunque Aguilar Alvear, insiste en su inocencia por el delito de homicidio, tiene en su contra a Montero Sarmiento, sicario que delinquía en Cesar y Guajira, quien confesó ayer bajo juramento que, por orden de Aguilar, mató a Miguel Antonio Alvarado Pedrozo, en crimen ocurrido el 2 de abril de 2009, en el barrio Santa Rosa de Valledupar
"No me dijeron en realidad lo que hacia el señor, yo no averigüé, yo solamente pasé del negocio a los hechos", manifestó el sicario, ante el Juzgado Cuarto Penal del Circuito de Valledupar.
Disputa fatal
La víctima fue instructor de Minería en el SENA y, para la época de su muerte, era socio de Rufino Aguilar y negociaban títulos mineros en Magdalena. EL PILÓN conoció que la teoría del caso que maneja la Fiscalía, está relacionada con la disputa que existía entre los socios por la venta de unos terrenos.
“Déjeme decirle señor Rufino, la justicia llega porque llega”, advirtió el testigo antes de salir de la sala de audiencias en el cuarto piso del Palacio de Justicia de Valledupar.
Minutos después, Montero Sarmiento fue trasladado por un grupo especial del INPEC a la cárcel de Cómbita, Boyacá, donde paga una condena por el asesinato de los hermanos Fabio Fidel y Francisco Javier Carrascal, asesinados el 3 de julio de 2009, en San Juan del Cesar, La Guajira.
Al cierre de esta edición, otros testigos declaraban en el juicio oral contra Rufino Aguilar Alvear, quien se encuentra detenido en la Cárcel Judicial de Valledupar.