La Alcaldía de Valledupar evalúa medidas de restricción más estrictas, como también priorizar a los pacientes que necesiten una cama en cuidados intensivos.
El actual comportamiento del covid-19 en Valledupar es de preocupación tanto para las autoridades administrativas como para la ciudadanía en general. A la fecha en este municipio la cifra de contagiados es de 34.472 desde el inicio de la pandemia, pero el número que ha causado alarma es la alta ocupación de camas de Unidad de Cuidados Intensivos, UCI, para adultos contagiados con este letal virus, el cual es del 99 %, traduciéndose en que hasta este lunes solo quedaban 4 camas disponibles de las 285 con que se cuenta tanto la red pública como privada.
Por esta razón la Alcaldía de Valledupar, en conjunto con la secretarías de Salud Local y Departamental, así como las diferentes IPS, dispuso de una sala de crisis permanente para establecer el plan de acción a seguir, principalmente para tener disponibilidad de camas.
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La secretaria de Salud local, Lina De Armas, indicó que la situación es muy crítica, al estar a solo un punto de llegar al 100 % de la ocupación de camas UCI.
“Se están evaluando los canales de solución para poder liberar algunas camas de cuidados intensivos, teniendo en cuenta que hay pacientes que están en UCI pero pueden seguir recibiendo el tratamiento en cuidados de segundo nivel para que esa cama se le dé a otra persona que requiera mayor atención”, dijo De Armas.
Explicó que por ahora no están escogiendo qué paciente ingresa o no a UCI, pero sí advirtió que de seguir con el mismo panorama se tendría que llegar a un triaje ético, es decir, decidir qué paciente va a UCI para salvarle la vida teniendo en cuenta el diagnóstico que presente.
Asimismo destacó que con el Hospital Eduardo Arredondo Daza se podrá asumir la hospitalización para liberar un poco la red privada.
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“Desde la administración municipal se están haciendo las gestiones a nivel nacional para conseguir ventiladores médicos y demás equipos que se requieran. Hay que decir que estamos recogiendo el desenlace de la Semana Santa, calculando que en 15 a 20 días podemos ir liberando, el porcentaje de contagio ya llegó a la cúspide y empezó a declinar un poco”, subrayó la funcionaria.
En esta misma reunión el alcalde de Valledupar, Mello Castro González, explicó que además de evaluar diariamente tanto la situación del virus en la ciudad como la ocupación de las camas UCI, también trabajan en conjunto con el Gobierno nacional para la autorización de decretos de orden público que permitan imponer nuevas medidas de restricción.
“Pensamos en medidas de orden público para cerrar más a la ciudad y tener un confinamiento más riguroso. Estamos pensando en una cuarentena, eso lo estamos evaluando, por eso tenemos una sala de crisis diariamente. El fin de semana nos fue bien, se hizo una verificación de la medida de toque de queda junto con la Policía y el gobierno departamental invitando a la ciudadanía a cumplirla y tener responsabilidad para salir adelante. Hubo incumpliendo en algunos sectores que hacen parrandas, pero esperamos con la ley seca controlar eso”, dijo el mandatario.
El colegio de Médicos del Cesar y La Guajira expresó que el colapso que se está viviendo en los hospitales y clínicas con atención a pacientes con coronavirus había sido advertido desde el gremio, por lo que siguen recomendando que se tome la medida de aislamiento por 14 días continuos con el acompañamiento de los entes territoriales.
“Esta es una situación desagradable para todos, tanto para el personal médico como para la sociedad; se nos puede venir una gran mortalidad debido a la falta de atención de pacientes en UCI, de por si un paciente en estas condiciones tiene el 40 % de probabilidad de salir adelante, pero si UCI tiene el 100 % de morir”, refirió Joaquín Maestre, presidente del Colegio de Médicos.
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Igualmente dijo que estas son medidas que se deben tomar a tiempo y no esperar que una situación ‘sobrenatural’ llegue a resolver la problemática.
“Sabemos que no es desde la administración municipal o departamental que no quieran cerrar porque quien autoriza es el Gobierno nacional. Nos estamos acostumbrando a que los muertos sean números, pero en nuestro departamento donde somos más pequeños no funciona igual que en la capital porque hay mucha familiaridad entre la ciudadanía y eso nos produce un gran dolor dejando marcas psicológicas”, subrayó el especialista.
De la misma manera subrayó que también hay colapso en el personal médico, encontrando a galenos con turnos hasta de 30 horas.
“Solo piensan en aumentar las camas UCI, pero eso no es solución porque la UCI la maneja un intensivista y tenemos a estos profesionales manejando 30 camas, cuando solo debe ser 8 y la atención se diluye para el paciente. Hay especialistas con desgaste físico y mental, hay algunas instituciones que las UCI son manejadas por médicos internistas y anestesiólogos y eso no es lo mismo, no porque no estén capacitados sino que no es su especialidad”, subrayó Maestre.
Frente a esta contingencia que ha causado el virus SARS-CoV-2/covid-19, diferentes clínicas del Cesar se han declarado en emergencia funcional por el gran número de pacientes que ha colapsado su capacidad de atención instalada.
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La más reciente en comunicar que se encuentra en esta posición fue la Nueva Clínica Santo Tomás, la cual informó que la capacidad instalada para atender pacientes con sintomatología respiratoria está en su máxima ocupación motivo por el cual se declara en emergencia funcional.
“Hacemos un llamado a toda la comunidad para que en la medida de las posibilidades hagan uso de las diferentes alternativas que tienen las diferentes aseguradoras en salud para brindar atención en casa o teleconsulta. Así mismo informamos que continúan restringidas las visitas de familiares en Unidades de Cuidados Intensivos y hospitalización como medida de protección y contención de la pandemia por el virus”, mencionó la clínica.
En este mismo orden, el Grupo Clínicas Médicos y el Instituto Cardiovascular del Cesar están en la misma situación.
POR: MILAGRO SÁNCHEZ FLÓREZ/ EL PILÓN
La Alcaldía de Valledupar evalúa medidas de restricción más estrictas, como también priorizar a los pacientes que necesiten una cama en cuidados intensivos.
El actual comportamiento del covid-19 en Valledupar es de preocupación tanto para las autoridades administrativas como para la ciudadanía en general. A la fecha en este municipio la cifra de contagiados es de 34.472 desde el inicio de la pandemia, pero el número que ha causado alarma es la alta ocupación de camas de Unidad de Cuidados Intensivos, UCI, para adultos contagiados con este letal virus, el cual es del 99 %, traduciéndose en que hasta este lunes solo quedaban 4 camas disponibles de las 285 con que se cuenta tanto la red pública como privada.
Por esta razón la Alcaldía de Valledupar, en conjunto con la secretarías de Salud Local y Departamental, así como las diferentes IPS, dispuso de una sala de crisis permanente para establecer el plan de acción a seguir, principalmente para tener disponibilidad de camas.
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La secretaria de Salud local, Lina De Armas, indicó que la situación es muy crítica, al estar a solo un punto de llegar al 100 % de la ocupación de camas UCI.
“Se están evaluando los canales de solución para poder liberar algunas camas de cuidados intensivos, teniendo en cuenta que hay pacientes que están en UCI pero pueden seguir recibiendo el tratamiento en cuidados de segundo nivel para que esa cama se le dé a otra persona que requiera mayor atención”, dijo De Armas.
Explicó que por ahora no están escogiendo qué paciente ingresa o no a UCI, pero sí advirtió que de seguir con el mismo panorama se tendría que llegar a un triaje ético, es decir, decidir qué paciente va a UCI para salvarle la vida teniendo en cuenta el diagnóstico que presente.
Asimismo destacó que con el Hospital Eduardo Arredondo Daza se podrá asumir la hospitalización para liberar un poco la red privada.
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“Desde la administración municipal se están haciendo las gestiones a nivel nacional para conseguir ventiladores médicos y demás equipos que se requieran. Hay que decir que estamos recogiendo el desenlace de la Semana Santa, calculando que en 15 a 20 días podemos ir liberando, el porcentaje de contagio ya llegó a la cúspide y empezó a declinar un poco”, subrayó la funcionaria.
En esta misma reunión el alcalde de Valledupar, Mello Castro González, explicó que además de evaluar diariamente tanto la situación del virus en la ciudad como la ocupación de las camas UCI, también trabajan en conjunto con el Gobierno nacional para la autorización de decretos de orden público que permitan imponer nuevas medidas de restricción.
“Pensamos en medidas de orden público para cerrar más a la ciudad y tener un confinamiento más riguroso. Estamos pensando en una cuarentena, eso lo estamos evaluando, por eso tenemos una sala de crisis diariamente. El fin de semana nos fue bien, se hizo una verificación de la medida de toque de queda junto con la Policía y el gobierno departamental invitando a la ciudadanía a cumplirla y tener responsabilidad para salir adelante. Hubo incumpliendo en algunos sectores que hacen parrandas, pero esperamos con la ley seca controlar eso”, dijo el mandatario.
El colegio de Médicos del Cesar y La Guajira expresó que el colapso que se está viviendo en los hospitales y clínicas con atención a pacientes con coronavirus había sido advertido desde el gremio, por lo que siguen recomendando que se tome la medida de aislamiento por 14 días continuos con el acompañamiento de los entes territoriales.
“Esta es una situación desagradable para todos, tanto para el personal médico como para la sociedad; se nos puede venir una gran mortalidad debido a la falta de atención de pacientes en UCI, de por si un paciente en estas condiciones tiene el 40 % de probabilidad de salir adelante, pero si UCI tiene el 100 % de morir”, refirió Joaquín Maestre, presidente del Colegio de Médicos.
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Igualmente dijo que estas son medidas que se deben tomar a tiempo y no esperar que una situación ‘sobrenatural’ llegue a resolver la problemática.
“Sabemos que no es desde la administración municipal o departamental que no quieran cerrar porque quien autoriza es el Gobierno nacional. Nos estamos acostumbrando a que los muertos sean números, pero en nuestro departamento donde somos más pequeños no funciona igual que en la capital porque hay mucha familiaridad entre la ciudadanía y eso nos produce un gran dolor dejando marcas psicológicas”, subrayó el especialista.
De la misma manera subrayó que también hay colapso en el personal médico, encontrando a galenos con turnos hasta de 30 horas.
“Solo piensan en aumentar las camas UCI, pero eso no es solución porque la UCI la maneja un intensivista y tenemos a estos profesionales manejando 30 camas, cuando solo debe ser 8 y la atención se diluye para el paciente. Hay especialistas con desgaste físico y mental, hay algunas instituciones que las UCI son manejadas por médicos internistas y anestesiólogos y eso no es lo mismo, no porque no estén capacitados sino que no es su especialidad”, subrayó Maestre.
Frente a esta contingencia que ha causado el virus SARS-CoV-2/covid-19, diferentes clínicas del Cesar se han declarado en emergencia funcional por el gran número de pacientes que ha colapsado su capacidad de atención instalada.
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La más reciente en comunicar que se encuentra en esta posición fue la Nueva Clínica Santo Tomás, la cual informó que la capacidad instalada para atender pacientes con sintomatología respiratoria está en su máxima ocupación motivo por el cual se declara en emergencia funcional.
“Hacemos un llamado a toda la comunidad para que en la medida de las posibilidades hagan uso de las diferentes alternativas que tienen las diferentes aseguradoras en salud para brindar atención en casa o teleconsulta. Así mismo informamos que continúan restringidas las visitas de familiares en Unidades de Cuidados Intensivos y hospitalización como medida de protección y contención de la pandemia por el virus”, mencionó la clínica.
En este mismo orden, el Grupo Clínicas Médicos y el Instituto Cardiovascular del Cesar están en la misma situación.
POR: MILAGRO SÁNCHEZ FLÓREZ/ EL PILÓN