Tras una reunión sostenida con el Invías y la Interventoría de las obras de la vía Valledupar–La Paz, las veedurías ciudadanas de estos municipios expusieron desacuerdos por la modificación al diseño original que propuso el consorcio ejecutor de la obra el pasado 25 de agosto.
En la reunión estuvieron miembros de las veedurías, de la interventoría, de las curadurías urbanas, el Invías y el consorcio constructor de Mincivil y Pavimentar, junto a miembros de la Sociedad de ingenieros y arquitectos del Cesar y otros ciudadanos, que se dieron cita para hacer un recorrido con el propósito de hacer seguimiento a las obras para que esta nueva carretera sea ejecutada directamente desde la glorieta de la Terminal de Transportes.
Durante este encuentro se sustentó que el diseño original de la doble calzada se puede realizar sin causar mayores afectaciones a la malla vial de Valledupar.
Los miembros de las veedurías acordaron realizar mesas técnicas para encontrar solución al proyecto desde el punto de vista técnico para beneficiar a Valledupar, su área metropolitana y el sur de La Guajira. Los ciudadanos han insistido en que la vía se mantenga en línea recta, de acuerdo al diseño inicial.
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“Lo que queremos es que se retome el trazado inicial. Existe la disponibilidad predial, sin que se cree un caos vehicular a la ciudad de Valledupar, sino que por el contrario se dé solución vial geométrica y de movilidad”, explicaron los veedores.
EL DISEÑO
La polémica alrededor de este proyecto se debe a que el último diseño contempló un nuevo desvío en curva hacia la entrada del bulevar del Aeropuerto Alfonso López, modificando el trazado inicial de 8,9 kilómetros en línea recta, desde la glorieta de la Terminal de Transportes de Valledupar hasta el empalme en La Paz.
El diseño actual corresponde a un estudio realizado por el consorcio MP Caribe, basado en un plan de manejo de tráfico; la vía se está ejecutando con una guía de adaptación ambiental. Este nuevo diseño se encuentra en revisión y aún no ha sido aprobado por Invías. Para conocer mayores detalles, EL PILÓN intentó establecer contacto con el consorcio, pero no hubo pronunciamiento.
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De acuerdo con lo establecido en el contrato de ejecución de la obra, la vía debe ser entregada el 31 de julio del 2022. Entre tanto, los vallenatos y los pacíficos siguen esperando que la doble calzada entre la capital del Cesar y el municipio de La Paz se materialice después de 40 años de haber sido proyectada por José Guillermo ‘Pepe’ Castro.
OTROS OBSTÁCULOS
Los propietarios de los predios que se encuentran ubicados sobre la zona donde se adelantan las obras han sido otra ‘piedra de tropiezo’, específicamente el que se sitúa en el eje central de la vía, el cual abarca 350 metros lineales; no obstante, se espera que acceda y otorgue un permiso de intervención voluntaria. De ser así se daría continuidad a la obra desde el puente Rafael Escalona hasta el municipio de La Paz.
En cuanto a las obras desde el puente en mención hacia Valledupar, los propietarios de algunos de los predios ya dieron los permisos para realizar la obra. Otros proyectan les sean adquiridos sus predios. “Es una obra pública y no le están cobrando a los propietarios la valorización que les generará la obra”, indicó una fuente a EL PILÓN.
Por: Andreina Galvez