Nos permitimos primero abordar un tema de actualidad que es una preocupación mundial. Mientras que en la mayoría de los países del mundo están con disposición de establecer controles a la desordenada liberación al ambiente del CO2 (dióxido de carbono) y otros contaminantes según lo acordado el 12 de diciembre de 2015 en Paris (COP21-Comité de las Partes), donde asistieron 195 países, pero hoy conocemos perplejos que el presidente del país que más ha contaminado en el Planeta como es Estados Unidos, el señor Trump, que entre otras cosas ha asistido durante 32 veces al psiquiatra y es único porque no tiene parecido con nadie en la Tierra, le diga al mundo semejante despropósito o burrada de que su país no participa del programa en mención, anteponiendo el pensamiento del rico Mac-Pato, en donde lo primero es lo económico antes que salud ambiental, vaya uno a saber de qué está hecho este señor que solo piensa en la plata ¡gran irresponsabilidad!
Podemos decir que hoy los gobiernos del mundo están conectados en trabajar en distintos objetivos que tienen que ver con la prevención y gestión de riesgo, menos contaminación, adaptación al cambio climático y en fin, en la recuperación y conservación de los recursos naturales, para que venga el presidente de la primera potencia mundial a expresar su no participación en el susodicho acuerdo, siendo que Estados Unidos es el segundo contaminador del medio ambiente después de China y es el que más ha contaminado el planeta desde la Revolución Industrial ¡Uy qué horror ! se volvió enemigo del planeta.
Después del anterior comentario pasamos a referirnos al título de esta columna en el cual tenemos sumo interés en ocuparla para recordar un poco lo que expresamos en nuestro escrito del día jueves 24 de noviembre del año pasado que titulamos “Durmiendo con el enemigo” y que trató sobre la dolorosa historia del cáncer del asbesto entre los colombianos. Decimos que este es una es un mineral flexible y resistente a las altas temperaturas y que por eso mismo es muy apetecido por los productores de fibra y los fabricantes de láminas para tejados, baldosas, derivados del papel, aislantes, tanques para almacenar agua, tubería y pinturas, entre otros, pero fíjense ustedes que a pesar de sus usos es un gran productor de cáncer. Desde que comenzaba el siglo XX, por allá en el 1905, los médicos ingleses demostraron que el asbesto, conocido también como amianto, producía cáncer. Tuvo que pasar un siglo más hasta comienzos del nuevo milenio cuando estaba despuntando el año 2000, para que muchas naciones del mundo comenzaran a proscribir su explotación minera y su uso en las fábricas, pero nosotros los colombianos estamos incluidos entre las excepciones ya que seguimos utilizando y explotando este material, muy a pesar que se han elevado voces y campañas para erradicar su uso, pero el mismo Congreso rechazó un proyecto en tal sentido.
Como hemos dicho el uso de este producto es perjudicial para la salud y está prohibido en más de 80 países del mundo.
Volver a recabar sobre este tema es porque nos asiste la gran preocupación que aquí en Valledupar y muchas otras ciudades y pueblos de Colombia sea normal o sin ninguna restricción su uso. Vemos como utilizamos tanques a base de asbesto para depositar agua, la mayoría de las viviendas de Valledupar por ejemplo, se encuentran techadas con material asbesto y nos preocupa aún más, saber que es posible que todavía esté en uso alguna tubería de asbesto cemento para conducir agua a nuestro hogares, para lo cual hacemos un llamado urgente tanto al señor gerente de Emdupar en Valledupar, y claro al señor Alcalde, para que se haga una revisión exhaustiva de las tuberías de distribución en la ciudad para proceder a su remplazo de manera inmediata, no vaya a ser que todavía tengamos algunos tramos con este tipo de material peligroso y que sin ser salubrista o especialista en oncología digamos que posiblemente pueda tener incidencia en el alto índice de cáncer que asedia a nuestros habitantes.
NOTA: Gracias señor Alcalde por atender este llamado.