El Juzgado Tercero Penal Municipal con Funciones de Control de Garantías no se pudo pronunciar, en la mañana de ayer, sobre la solicitud de libertad por vencimiento de términos en el proceso que se sigue en contra de Erinson Romero De Ávila, quien es señalado de asesinar a Jhon Jairo Herrera Oliveros en un atraco en el barrio San Martín, sur de Valledupar, a causa de que la diligencia tuvo que ser reprogramada.
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La audiencia no se pudo realizar porque según el abogado defensor, José Julián Castillo, se presentaron problemas técnicos que no permitieron que la diligencia se llevara a cabo de manera virtual.
Esto significa que la audiencia deberá ser nuevamente reprogramada y notificada por el juez coordinador de los estrados judiciales de la ciudad. Con esta ya son dos veces que es reprogramada pues la primera vez fue el pasado 6 de mayo, fecha en que el juzgado no pudo efectuarla por estar de turno con las audiencias de la Unidad de Reacción Inmediata de la Fiscalía.
No obstante, la petición del abogado José Julián Castillo continúa en firme y Erinson Romero De Ávila podría conseguir la libertad provisional por los delitos de homicidio agravado, hurto calificado agravado y fabricación, tráfico y porte de arma de fuego o municiones.
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La solicitud se basa en el artículo 317 con numeral 5 del Código de Procedimiento Penal Colombiano, que indica que si a un procesado transcurrido los 120 días contados a partir de la fecha de presentación del escrito de acusación no le han iniciado el juicio tiene derecho a pedir la libertad provisional por vencimiento de términos.
Esto ocasionó molestia entre los familiares de la víctima porque consideran que se abre una puerta para que el crimen quede en impunidad.
“Estoy inconforme porque la justicia no cumple con lo del peso de la ley porque prácticamente ese hombre que le quitó la vida a mi hijo lo van a soltar a la calle como si nada hubiera pasado”, dijo Enith Ester Oliveros Ochoa, madre del occiso.
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Erinson Romero De Ávila está privado de la libertad desde inicios del mes de abril del año 2019 tras ser capturado en un operativo de la Sijín en Valledupar.
Su detención se materializó en la carrera 43 con calle 6 de la vía pública del barrio La Nevada, lugar en que los uniformados adelantaban controles de requisa a personas, notando que este tenía vigente una orden de captura en su contra proferida por el Juzgado Segundo Penal Municipal con Funciones de Control de Garantías Ambulante.
Así las cosas una vez fue presentado a audiencias preliminares el despacho judicial decidió enviarlo a prisión.