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Refuerzan medidas en el Cesar tras atentado en Barranquilla

Policías aumentan medidas en el Cesar.

Con el atentado criminal que sorprendió a las 6:40 de la mañana del sábado a los uniformados de la Estación de Policía San José en Barranquilla, que dejó cinco muertos y 42 heridos, las autoridades del departamento del Cesar toman medidas de seguridad para reducir el riesgo que situaciones como esta se vuelvan a presentar.

En una comunicación directa con los subcomandantes de estación en los diferentes municipios del departamento, la Policía Nacional inició una serie de instrucciones sobre las medidas de autoprotección y verificación que los efectivos deben desarrollar.

“Desde el momento en que conocemos los hechos en Barranquilla, hacemos una reunión con el Ejército Nacional, donde tratamos de establecer las medidas a tomar. La institución actualmente trabaja con personal antiexplosivo realizando rondas constantes en las instalaciones policiales, y hombres encargado de alertar a las unidades para que estar pendientes de personas sospechosas, en vehículo o moto, que pueda agredir la institucionalidad o ciudadanía en general”, dijo el comandante de la policía Cesar, coronel Mauricio Pedraza Rocha.

El peso del cumplimiento de las actividades establecidas por los oficiales, recae en los subcomandantes de estaciones que con actas y constancias se les notificó de la importancia de seguir los lineamientos de los planes de trabajo.

Sin embargo, los oficiales resaltan la importancia de trabajar mancomunadamente con fuentes humanas, por la operatividad de los grupos ilegales de utilizar a foráneos para perpetrar los atentados, que comúnmente van dirigidos a la Policía Nacional y civiles.

Los antecedentes muestran que en este tipo de hechos, es común en el Ejército de Liberación Nacional, ELN. El departamento del Cesar en el año 2016 sufrió una serie de atentados en subestaciones de Policía de los municipios de Curumaní, Río de Oro y Gonzáles, que según las autoridades fueron ejecutadas por esta célula criminal.

Uno de esos se registró el 9 de julio del mencionado año, cuando un grupo de presuntos guerrilleros atacaron a medianoche a la estación de Policía del corregimiento La Vega de Curumaní, dejando como saldo cuatro heridos y un presunto subversivo muerto.

Otro se presentó en la estación Los Ángeles de Gonzáles, en donde diez uniformados que permanecían en el comando de Policía a medianoche resistieron a un ataque de los revolucionarios, con granadas y ráfagas de tiros de fusil.

Similar al reciente atentado que recibió el cuerpo de oficiales de la capital del Atlántico mientras recibían el turno para laborar. “Los ataques son una especie de retaliación que tienen ellos para mostrar un poderío cobarde, porque lo que hacen es dejar artefactos explosivos esperando el descuido de un funcionario y activarlos. Son represalias contra la fuerza pública”, puntualizó Pedraza.

En ese sentido la Policía alertó a las unidades de los territorios del Cesar como Gonzáles, Río de Oro, La Mata y demás para que con ayuda de la ciudadanía adviertan sobre personas extrañas que lleguen a la región o tengan actitudes sospechosas.

CONSTERNACIÓN NACIONAL

Estas medidas y antecedes en el departamento del Cesar no son ajenas al atentado que vivió la ‘arenosa’, pues, el pasado domingo, una vez más el ELN, se atribuyó el resultado de las actividades terroristas perpetradas en la estación de Policía San José.

Así lo dio a conocer al divulgar un comunicado de prensa en el que “realiza un balance” sobre los últimos hechos presentados en el país.

En la misiva el grupo expresa que defiende los derechos humanos y a la clase menos favorecida que según ellos, está siendo reprimida por las autoridades. “No hay un día en que no ocurra un atentado contra la dignidad y la vida de los habitantes de la llamada capital de vida y de las ciudades de Colombia, por parte de la fuerza pública”, dice el comunicado.

Al tiempo que explica que con base a diversas situaciones sociales, habría cometido el atentado que conmocionó al territorio nacional. “En ejercicio legítimo del derecho a la rebelión, se realizó la siguiente acción militar: a las 6:40 a.m. del 27 de enero se atacaron fuerzas policiales de la estación San José, en el sur de Barranquilla, capital del departamento del Atlántico”, puntualizó la estructura ilegal.

Al respecto Luis Carlos Villegas, ministro de defensa señaló a través de Caracol Radio, que el ELN, sí es el autor de los atentados que se presentaron en la ciudad de Barranquilla, Soledad y Santa Rosa. Asimismo rechazó el accionar afirmando que son un grupo que no tiene límites al momento de cometer acciones terroristas.

POSIBLE PARTICIPANTE

Las autoridades tienen capturado al supuesto responsable de colocar los artefactos explosivos en la estación San José. Se trata de Cristian Camilo Bellón Galindo, quien fue estudiante de filosofía de la Universidad Pedagógica de Bogotá, y que según las autoridades, se habría trasladado hasta Barranquilla para cometer el ataque. La Fiscalía asegura que cuenta con evidencia suficiente para señalarlo como el autor material, ya que portaba un radio detonador con el que habría sido accionado el artefacto explosivo. Ayer fue enviado a la Cárcel de Valledupar.

“Se ha logrado establecer que el capturado no tiene arraigo en Barranquilla. Las investigaciones avanzarán hasta dar con los autores intelectuales de este caso. Será una investigación conjunta entre Fiscalía y Policía”, señaló el fiscal general Néstor Humberto Martínez.

Entre tanto, el comandante de la Policía Metropolitana de Barranquilla, general Mariano Botero Coy en una rueda de prensa a los medios, manifestó que la captura se debió a una alerta de los uniformados que “observaron a una persona sospechosa, a la cual detuvieron y le encontraron objetos como un radio de comunicaciones y unas anotaciones con información policial”, que serían de Bello Galindo, quien se encontraba en el lugar de los hechos.

El hombre de 31 años, inicialmente fue presentado ante los estrados judiciales de Barranquilla, el anterior domingo para las respectiva audiencia concentradas por los delitos de homicidio agravado, tentativa de homicidio, terrorismo agravado y uso de explosivos, pero solo fue posible la legalización de captura, por lo que el sindicado solicitó ante la justicia ser representado por un abogado de confianza y no por uno de oficio.

Ayer en la continuación de la audiencia la Fiscalía General de la Nación le imputó los delitos de homicidio agravado, tentativa de homicidio agravado, terrorismo agravado, porte de armas de fuego, municiones y explosivos; así como la utilización ilícita de redes de comunicaciones y delitos contra la vida e integridad emocional de los animales, a los que no se allanó. El sindicado fue cobijado con medida de aseguramiento en la Cárcel de Mediana y Máxima Seguridad de Valledupar, conocida coloquialmente como ‘La Tramacúa’.

OTRO SOSPECHOSO

Como Jefferson Torres Mina, las autoridades identificaron al segundo sospechoso del atentado en Barranquilla. El hombre natural del Valle del Cauca, de 26 años, quedó registrado en una cámara de seguridad con una actitud sospechosa en cercanías del puesto de Policía.

Cristian Camilo Bellón Galindo

“Estamos ubicando a una persona no solamente en Barranquilla sino a nivel nacional. Ya Interpol también ha sido notificado para que a nivel mundial todos los países que hacen parte de la Interpol lo busquen, lo ubiquen y notifiquen a Colombia”, señaló el director de la Sijín, el general Jorge Luis Vargas en declaraciones a los medios de comunicaciones nacionales.

La fuerza pública ofrece 50 millones de recompensa a quien de información sobre el paradero del hombre que habría actuado en coordinación de Bello Galindo.

LAS VÍCITMAS

Con varios mensajes de justicia y en medio del dolor los familiares velaron y sepultaron a las víctimas fatales del atentado; las cuales fueron: Yamil Rada Muñoz, Yosimar Márquez Navarro, de 29 años y oriundo de Sucre, el patrullero llevaba cinco años en la Institución. Estaba casado y deja huérfana a su hija de tres años; Freddy de Jesús López Gutiérrez, nacido en Ciénaga (Magdalena), tenía 28 años, ocho de ellos en la Policía Nacional. Deja a su hijo de cinco años; Freddys de Jesús Echevarría Orozco, de 24 años, llevaba cuatro años en la Policía. Era oriundo de Soledad (Atlántico) y el patrullero Cano Arteta, de 31 años, llevaba cuatro en la Policía Nacional. Era oriundo de Baranoa, Atlántico, y deja una hija de apenas tres años.

SOBREVIVIENTES

Los heridos del atentado en Barranquilla continúan en recuperación de las heridas recibidas en la estación San José, entre los que se encuentran dos uniformados que residen en Valledupar, los cuales son: Joel Chacón Reyes y Dionisio Sandoval Moreno.

Los policías, cuyas familias están en la capital cesarense, fueron intervenidos quirúrgicamente tras caerles esquirlas de los artefactos explosivos detonados.

Soreyda Reyes, mamá de Joel Chacón, expresó que la tomó por sorpresa que su hijo saliera lastimado de la estación en la que tenía conocimiento no hacía parte.

“No sabía por qué estaba en la Estación San José, pero después nos enteramos que era que estaban formando para recibir turno y que todo se presentó muy rápido y fue bastante trágico para los compañeros. Cuando pasaron los hechos él me llamó a decirme que estaba bien pero no me comentó más nada. Me enteré por una amiga que había sucedido un atentado en Barranquilla y que preguntara a ver si Joel estaba bien. Lo llamamos otra vez y él nos comentó lo sucedido”, dijo Reyes a EL PILÓN, quien vive en el barrio Nueva Esperanza.

Precisó además que su hijo es natural de Barranquilla, pero lleva años junto con ellos viviendo en la capital cesarense.

Este joven de 29 años que recientemente es miembro de la Policía Nacional, fue intervenido quirúrgicamente y se encuentra estable de salud.

El otro sobreviviente, Dionisio Sandoval Moreno, de 37 años, natural de Valledupar, presenta similar condiciones de salud a Reyes. Su hermana, Gladys Sandoval Moreno, en conversaciones con este medio de comunicación manifestó que el afectado, quien lleva 17 años en la institución, está estable de salud tras salir recientemente de cirugía. La familia de Sandoval Moreno está radica en el barrio Cicerón Maestre, ubicada en el suroccidente de Valledupar.

Marllelys Salinas / EL PILÓN
salinasmarllelys@gmail.com

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