Se abrazan con ellos, se suben a las motos, se ponen cascos y chalecos, los invitan a las inscripciones de campaña, les hacen mil promesas, todo con el mismo objetivo: conquistar el voto de los mototaxistas.
En la carrera por la Alcaldía de Valledupar, los aspirantes se la han jugado por ser el candidato de los mototaxistas de la capital del Cesar, una población de alrededor de 10.000 personas, mayoría hombres, que se multiplica a 30.000 si se cuentan los familiares.
EL PILÓN habló con líderes gremiales. Contrario a hace cuatro años, cuando Mello Castro congregó la votación en una forma de castigo a Ernesto Orozco, el candidato de la administración de entonces, este año los conductores informales están esparcidos.
“En estas elecciones el gremio está dividido. No hay un candidato que tenga la mayoría porque los mototaxistas han sido engañados por los políticos que ofrecen el cielo y la tierra, pero cuando se montan se olvidan de nosotros”, cuenta Walter Núñez, líder de los mototaxistas.
LAS PROMESAS
El problema con este gremio y las promesas de los candidatos es que la norma no permite prestar el servicio de transporte público a través de la moto, por eso, cualquier propuesta debe girar hacia la popular reconversión laboral.
En Valledupar legalmente constituidas hay 5 asociaciones o cooperativas, sin embargo, organizadas en las calles hay más de 30. Se organizan por barrios, lugares de atención, empresas o conocidos. Unas cooperativas reúnen a 50 o 100 mototaxistas. Otras alcanzan hasta los 500.
Las promesas de campaña han causado más de un dolor de cabeza porque en el afán de conquistar esos casi 10.000 votos, los candidatos prometen lo imposible. Por ejemplo, el alcalde Mello Castro, como candidato prometió “tirar al río las llaves de la camabaja”, pero al final terminó concesionando el tránsito de la ciudad.
LA MACHACADA RECONVERSIÓN
Wilson Martínez lidera la Asociación Motociclistas Emprendedora de Valledupar, que según sus cuentas tiene alrededor de 500 asociados. Como su nombre lo dice, lo que quieren es encontrar oportunidades a los mototaxistas para que no sigan “aguantando el caliente sol de Valledupar”.
Como asociación ya definieron que votarían por Ernesto Orozco; otras asociaciones están con Cristian Moreno y Camilo Quiroz. Pero todos los líderes del gremio de mototaxistas le contaron a EL PILÓN que tienen un problema: la falta de credibilidad porque los políticos siempre les incumplen.
“Como líderes hemos buscado alternativas porque hay que parar el desorden que hay en la ciudad. Merecemos un mejor transporte. Nosotros le hablamos a los muchachos, nos siguen, pero los políticos nos quedan mal y vamos perdiendo la credibilidad. Por eso uno ve que cada mototaxista vota por su lado”, explicó Walter Enrique.
Otro líder gremial, bajo reserva, comentó que la desconfianza llegó a tal punto que simplemente van a las caravanas o campañas donde les ofrezcan ‘para la gasolina’. “Se ven caravanas de candidatos con 200 mototaxistas, pero al otro día otro candidato hace una caravana y llegan los mismos mototaxistas. Están pendientes de los $20.000 pesos porque ya no creen en los candidatos”.
Parece que el gremio llegará dividido al 29 de octubre, y que públicamente no se inclinarán por un candidato a la Alcaldía de Valledupar, aunque Camilo Quiroz y Christian José Moreno han sido los que más han buscado su apoyo.
Camilo les prometió que conformarán la Red Ciudadana Ojos en la Calle; Christian José Moreno que tiene un plan piloto para organizarlos; Ernesto Orozco que no los atacará; Ricardo Reyes se comprometió con crear oportunidades; Lina de Armas con la reconversión. Todos con el mismo objetivo: ser el candidato o candidata de los mototaxistas.