La ubicación geográfica del Cesar, su amalgama cultural y raíces religiosas permiten que propios y turistas gocen al máximo de estos días de descanso y recogimiento. EL PILÓN les presenta un abanico de posibilidades para hacer en esta temporada en compañía de familiares y/o amigos.
Iglesias coloniales
Un buen plan para esta temporada es la visita a las iglesias coloniales del Cesar como lo son: la Capilla Colonial de Valencia de Jesús, Iglesia La Inmaculada Concepción, Iglesia Nuestra Señora del Rosario (La Catedral), y Capilla de San Antonio de Badillo; las cuatro están en la lista de Bienes de Interés Cultural de Ámbito Nacional.
“Estas iglesias son buenos puntos para conectarse con la historia local y vivir el fervor de la Semana Santa”, aseguró Pedro Durán, coordinador de Proyectos de la Fundación Aviva; y apoyo administrativo en la Implementación del PEMP (Plan Especial de Manejo y Protección).
Atractivos importantes
Al visitar la ciudad de Valledupar es clave visitar atractivos significativos como:
-Río Guatapurí: aunque Valledupar no tiene mar, por ella discurre el río Guatapurí, que se desliza desde la Sierra Nevada de Santa Marta y baña la ciudad. Un lugar para apreciarlo es el balneario Hurtado, donde llegan familias enteras para descansar y darse un baño de agua fría; allí se ve sobre una roca la estatua dorada de Rosario Arciniegas, una niña que, según la leyenda, se convirtió en sirena al zambullirse en sus aguas en Semana Santa.
-Centro Histórico: su sector fundacional, declarado Bien de Interés Cultural de carácter nacional el 16 de junio de 2000, posee indiscutibles calidades urbanas y arquitectónicas que deben ser conservadas, por ejemplo, los centros de manzana ubicados en torno a la plaza Alfonso López, que pueden recuperarse para el disfrute de la comunidad. En este sector, son numerosas las edificaciones de la época colonial que conservan sus fachadas y perfiles continuos.
La arborización, tanto al interior de los centros de manzana como en las calles y demás espacios públicos, complementa y enriquece el paisaje que rodea la ciudad, cuyo telón es la Sierra Nevada de Santa Marta.
-La Casa Museo del Acordeón de ‘Beto’ Murgas, en la carrera 17 No 9A-18, San Joaquin, que ofrece una visión global sobre el principal instrumento del vallenato; también permite apreciarlo de cerca, y entender las distintas etapas de su evolución.
-El Centro de Memoria ‘El Cuartico’, ubicado en la carrera 14 No 9-50 del barrio San Joaquín, que invita a viajar a los tiempos en que Valledupar era un pueblito de pocas casas.
-La Tienda Museo ‘Compae Chipuco’, ubicado a un costado de la plaza Alfonso López, donde se encuentra la historia de la música vallenata y su máximo evento el Festival de la Leyenda Vallenata; y el Centro Artesanal Calle Grande, ubicado en la calle 16 # 7-18, que es un pasaje comercial para quienes estén interesados en llevar recuerdos o souvenirs. Allí está un grupo de artesanos de la región que ofrecen: mochilas, sombreros, accesorios como pulseras y aretes, llaveros, elementos musicales, dulces típicos, hamacas, entre otros elementos.
Glorietas
Valledupar se caracteriza por ser una ciudad de muchas glorietas, que se distinguen por monumentos de gran magnitud, visitados por turistas para tomarse fotografías y llevarse un recuerdo de su paso por la ciudad:
-Pilonera Mayor
-Silla de Diomedes Díaz
-Pedazo de acordeón
-La María Mulata
-Los Gallos
-Los Músicos
-La Chichamaya
-Los Poporos
-El obelisco
-El cacique Upar
-Hernando de Santana
Annelise Barriga Ramírez/ EL PILÓN
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