En una clínica de Barranquilla murió el excontralor departamental, Alberto Uribe Oñate, quien se desempeñó en ese cargo durante los gobiernos de Hernando Molina Araújo, Luis Carlos Ariza y Rodrigo Canosa.
El exfuncionario empezó a padecer quebrantos de salud en noviembre del año pasado cuando se encontraba en Bogotá, por lo que fue recluido en una clínica y luego tras una lucha librada por su familia con la EPS a la que estaba afiliado, logró ser remitido a Barranquilla.
Sin embargo, en la capital del Atlántico las cosas no mejoraron y según su esposa, María Eugenia Saldaña, empeoraron al punto que lo dejaron descompensar lo que lo llevó a la muerte el pasado martes a las 8:30 de la noche.
Saldaña en medio de lágrimas dijo que fue una lucha para que pudieran atender a su esposo, incluso debió dirigirse a varios medios de comunicación a denunciar a la EPS porque no quería autorizar el traslado.
“Todo el tiempo fue una lucha, le ordenaron una transfusión de sangre y solo hasta el lunes en la noche se la colocaron, fue terrible”, dijo la mujer.
Uribe Oñate inicialmente presentó un dedo doblado y luego de varios exámenes le encontraron encefalopatia, pero debido a las demoras de la EPS perdió mucho tiempo, por lo que la familia considera que se presentó negligencia médica.
El pasado martes alrededor de las 8:30 de la noche, Uribe Oñate presentó dos paros y debido a que se encontraba descompensado murió.
Uribe Oñate estudió economía en la Universidad del Atlántico, se desempeñó como contralor del Departamento entre 2004 y 2008; fue subcontralor municipal y departamental, además de otros cargos públicos en la Alcaldía y la Universidad Popular del Cesar.
Redacción política