BITÁCORA
Un día como hoy, hace 229 años nació Simón Bolívar, el libertador de América; un hombre polémico que pese a su temperamento, su exquisita cultura y preparación tuvo que enfrentar muchas frustraciones en su pretensión de ver convertidos a Colombia, Venezuela, Perú, Ecuador y Bolivia en una sola nación soberana e indivisible. Su sueño de unificación se vio malogrado por los intereses que cada provincia, en su momento, tenía con respecto a la independencia y al manejo del poder.
Siglos después, Bolívar sigue siendo un símbolo revolucionario, principalmente en Venezuela, cuyo presidente, desde hace trece años, cuando llegó al poder, ha adoptado cambios estructurales en la forma de gobernar, basados en una revolución Bolivariana con un corte socialista que asumió una nueva conciencia nacional, para ponerle fin a la corrupción que tanto había desgastado ese país.
En medio de críticas y seguidores, Hugo Chávez se ha entronizado en el poder buscando expandir su proyecto bolivariano a otras latitudes de Latinoamérica. Sus comunes polémicas internas y externas lo han caracterizado con un mandatario locuaz, con un discurso popular y reaccionario, más al estilo caudillista incendiario, que de estadista. Hugo Chávez defiende las ideas de Bolívar y se cree su máximo seguidor, hasta el punto que hace algunos años, cuando comenzaba a gobernar la República Bolivariana de Venezuela, sorprendió a muchos diciendo que “el espíritu de Simón Bolívar estaría siempre sentado a su lado. Cual notario, confidente o asesor de imagen, Bolívar estaría siempre allí para gobernar codo a codo”.
Lo cierto es que ahora, cuando faltan menos de tres meses para que pueda relegirse por cuarta vez consecutiva, tendrá que renunciar a su sueño de creerse la rencarnación de Simón Bolívar, pues el también candidato a la presidencia, Henrique Capriles, tiene todo el derecho a heredar los postulados de Bolívar por ser descendiente de él, aunque es posible que no esté muy interesado en dicha herencia, porque hasta ahora no se ha pronunciado al respecto. Según el historiador y genealogista, Antonio Herrera-Vaillant , Henrique Capriles candidato a la presidencia de la República Bolivariana de Venezuela y máximo opositor del actual presidente Hugo Chavez, sería sobrino octavo de Simón Bolívar.
Chávez quien tanto ha sufrido por los ataques de sus contradictores y por el cáncer que padece, deberá enfrentar ahora un nuevo reto; el de ir en contra de quien lleva en sus venas la sangre del libertador; una figura nueva quien representa la renovación política en Venezuela, la fuerza de aquellos que esperan un cambio después de 13 años de monopolio del poder por parte de un solo hombre, lo que pone en duda la legitimidad de una democracia, en la medida que no hay cambios en sus clase gobernante.
Chávez debe estar sufriendo una especie de shock, parecido al que sufren muchos jóvenes quienes creyéndose hijos únicos, un día cualquiera descubren que tienen otro hermano con quien tienen que compartir el legítimo derecho a heredar todo lo que antes creía solo de él. Así las cosas, cuando muchos creían que a falta de herederos, Chávez había salido a reclamar las ideas del libertador, irónicamente hoy un sobrino octavo y un sobrino sexto de Bolívar, hacen parte de una sola propuesta presidencial que busca derrotarlo en los comicios del 7 de Octubre.
Chavez, que tanto ha despotricado de Capriles, criticándolo, persiguiéndolo con odio, hoy debería rendirle honor por ser un descendiente de su gran ídolo. Esta es quizás una señal clara de que el poder puede empezar a escurrírsele de las manos, pues el alma de Simón Bolívar, tal vez cansado de las malas interpretaciones que Chávez ha hecho de sus ideales, haya decidido buscar a un familiar suyo para que reinterprete el sueño de hacer una nación soberana e indivisible, regida por los principios de libertad orden y justicia para todos.
Si bien, mucha gente defiende los ideales bolivarianos desde la revolución Chavista, muchos creen también que los ideales bolivarianos no pueden seguir utilizándose para perpetuarse en el poder, sino para renovar un país en el que urge la unificación que tanto había soñado Bolívar y que irónicamente, hasta ahora lo único que ha hecho es polarizar a los venezolanos.
@Oscararizadaza