Es una buena estrategia escuchar lo que opina la gente en la calle, en los barrios y comunas de Valledupar sobre lo que ocurre en términos de seguridad e inseguridad. La Administración de Valledupar ha mostrado interés en el tema en los últimos días y junto con la Policía Nacional ha ido a diferentes sectores a pedirle a la comunidad mayor colaboración cuando conozcan o sean víctimas de hechos delictivos, porque sólo así se podrá atacar este fenómeno social que tiene atemorizados a los ciudadanos. No en vano, el 40% de los habitantes de Valledupar se sentía inseguro en el 2012 en toda la ciudad, de acuerdo con la Encuesta de Percepción Ciudadana, y una cifra similar en su barrio. Cifras que en el 2013 seguramente han aumentado.
Recientemente el Alcalde de los vallenatos se fue al barrio Los Cortijos y allí realizó un Consejo Comunitario de Seguridad, lugar que ha sido azotado con mayor énfasis por los delincuentes –aunque los hechos ocurren en todo lo largo y ancho de la ciudad-, y anunció más controles y más inversiones para el Parque de este sector, centro de operaciones de los drogadictos y delincuentes que salen de ahí a cometer sus fechorías.
Al parecer, los índices de atracos y hurtos en Los Cortijos han disminuido. Sin embargo, la comunidad no sólo de este barrio, sino de todos los de la ciudad, esperan una mejor y oportuna respuesta de la Policía Nacional, cuando acuden a su línea 123 o a los números celulares de los cuadrantes, debido a que de 10 casos, cuatro son atendidos de manera inmediata y en los restantes nunca hacen presencia.
A esta jornada de presencia institucional, se le suma la desarrollada en la Urbanización Nando Marín, donde habitan las primeras 95 familias beneficiadas con el programa de viviendas gratis, que también temen por la inseguridad del lugar, especialmente porque es un barrio nuevo que está a expensas de la delincuencia y rodeado de lotes enmontados que se convierten en cómplices de la inseguridad. Lo importante en este tema es que el Comandante de la Policía en Valledupar dijo que reforzaría las patrullas móviles y pidió denunciar los hechos delictivos.
Los consejos para la seguridad son muchos: denuncie, colabore, no se quede callado, entre otros. Pero la realidad es otra. La ciudadanía se siente acorralada y cada sector espera su turno para desahogarse con las autoridades. La tarea es ardua y difícil, pero no imposible si todos empujamos para el mismo lado. Martin Luther King dijo: No me duelen los actos de la gente mala, me duele la indiferencia de la gente buena”.