El pasado 30 de octubre, pasadas las nueve de la noche, fue asesinado Edinson Maestre Nieves en una de las fincas consideradas como zona de ampliación del resguardo kogui, malayo y arhuaco, exactamente sobre el corregimiento de Patillal, municipio de Valledupar.
Junto al cadáver las autoridades encontraron un panfleto de las Águilas Negras en el que se amenazaba con nombre directo a varios integrantes de la comunidad de tezhumke y a los dirigentes de la familia wiwa, los Bolívar.
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El asesinato de Edinson en octubre y de Jefferson Loperena el 1 de enero llevaron a que las autoridades del resguardo indígena kogui – malayo – arhuaco Sierra Nevada de Santa Marta presentaran un oficio en el que pidieron acciones de protección colectiva a las entidades estatales.
“Lo que nos preocupa es que se han venido presentando hechos que atentan contra los derechos fundamentales de nuestro pueblo, un pueblo que está en estado de exterminio, físico y culturalmente”, expresó el concejal de Valledupar y miembro de la comunidad wiwa, Pedro Loperena.
Los pueblos indígenas que habitan en la Sierra Nevada de Santa Marta están rodeados de economías y bandas criminales, organizaciones que lideran la minería ilegal. Además enfrentan, denuncian, la tala indiscriminada de árboles. La defensa de esos espacios considerados sagrados ha ocasionado las quemas de sus sitios sagrados y amenazas a las autoridades, como el caso de varios docentes que fueron amenazados de muerte.
Incluso, a finales del año pasado se cruzaron guardianes de los pueblos indígenas y sujetos armados que desarrollaban la excavación de material de arrastre en la cuenca del río Jerez en jurisdicción del corregimiento de Campana Nuevo, Municipio de Dibulla, La Guajira.
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“La situación que se vive en los alrededores de la Sierra Nevada no es fácil y cada día se vuelve más preocupante sobre todo con los panfletos de aparecieron a fínales del mes de diciembre del 2020”, reza el oficio.
Por eso, desde la comunidad solicitan a la Unidad Nacional de Protección tomar “las medidas necesarias para salvaguarda la vida e integridad del pueblo wiwa”.
EL PILÓN