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Las dos caras de la moneda

Mientras se corrió la voz por redes sociales de un supuesto retén de las Farc en la vía Valledupar-Bosconia, que entre otras cosas resultó falso según las autoridades, ocurren noticias que alientan a que se den procesos positivos para la reconstrucción del tejido social del departamento del Cesar, como es que ya en las zonas afectadas por la minería ilegal en el departamento del Cesar se emprende proceso de restitución de tierras.

La Unidad de Tierras del Cesar informó que ya llegaron al municipio de El Paso, eje minero del Cesar, donde ocurrieron múltiples hechos victimizantes que hicieron que familias de campesinos salieron de sus predios, huyendo de la violencia.
Es una buena noticia que estén socializando los efectos de la Ley 1448 de 2011 en los municipios de El Paso, Chimichagua y La Jagua de Ibirco, todos municipios muy golpeados por la violencia. En esa zona más de mil personas salieron desplazadas, según las cifras oficiales de Justicia y Paz, y otras 500 fueron asesinadas. Aún quedan 200 personas desaparecidas.

Este respiro que otorga la Ley para que aviven la esperanza de recuperar las tierras que les quitaron o que tuvieron que dejar abandonadas por miedo a morir, es un aliciente. Por eso no cae nada bien que se encienda la llama otra vez violencia y aparezca el fantasma que se creía ya no aparecería más.
Con esta Plan que ha denominado la Unidad de Tierras ‘Estrategia 20/15’, atenderán, según fuentes oficiales de la entidad, 300 solicitudes de predios que estén ubicados en los municipios mencionados.

En el eje minero hay un gran trabajo por hacer, el tema de tierras no es fácil pero tampoco imposible. Por eso es clave la colaboración de las comunidades y de las autoridades para que se atiendan en realidad a los despojados y no salgan como en otras zonas, las falsas víctimas o falsos reclamantes.

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