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La universidad y la carretera a La Paz

Hay dos cosas, una buena y otra mala. Comencemos por la buena, la inauguración parcial de la Universidad Nacional que por fin fue entregada por el gobierno departamental con un costo de $60.000.000.000,oo de pesos, bastante plata, así que felicitaciones al señor Gobernador Franco Ovalle por el empeño que le puso para que esa magna obra no se convirtiera en un elefante blanco. Estamos felices con que este centro educativo funcione en La Paz, la tierra de mis amores, pero, viene el terrible pero, cómo se va a hacer para que los estudiantes que viven aquí en esta capital y sus corregimientos puedan llegar oportunamente a clases, tendrán que levantarse a las 2 de la mañana porque con esa cantidad de gente, estudiantes, docentes y empleados con sus carros, motos y ciclas esa carretera va a ser un verdadero infierno; no más hoy fui a La Paz y duré más de media hora y eso que lo hice temprano. Es urgente, es pa’ ya, que se tomen cartas en el asunto y se den a la labor de la construcción de la doble calzada, por donde está que son 15 kilómetros o por la Cuarta a La Paz, que son 7 utilizando el puente que está construido, si es que sirve, porque he oído conceptos de que ya está derruido y hay que reemplazarlo, ojalá que no, pero la verdad que esto es urgente porque a cualquiera se le revienta la hiel cuando tiene que salir por esta carretera.

Se me ocurre que también se puede habilitar la carretera de Pepe Castro, que fue el de la idea y construyó el puente con un solo carril y dejar la existente para el otro carril. Cualquier vaina que venga es bueno pero hay que hacer algo y hacerlo rápido, no como la universidad que duraron cinco años para construirla y oigo decir, porque no fui, no fui invitado que está incompleta y que le falta mucho para su normal funcionamiento, pero esa parte ya le toca a Universidad Nacional o la Nación, de verdad no sé a quién porque soy un ignorante y de eso no sé, pero tengo un cerebro que me permite pensar que quien sea debe hacerlo rápido para que lo que existe no se vaya a deteriorar o lleguen mil o más exguerrilleros o venezolanos y la invadan tal como pasó con el Hospital de Maternidad, construido en la administración de Jhonny Pérez que fue totalmente desvalijado y destruido por unos invasores.
Se acabó el espacio, y la segunda cosa, la mala la dejo para el próximo artículo.

Señor Alcalde estoy obsesionado y no pienso en otra cosa cada vez que tránsito por las carreras 9, 7 y la calle 17, que en usted y su secretario de Obras Públicas. Que terquedad, no es por mí, es por el Valle y sus habitantes que hay que mandar a “coger” los huecos de esas vías, por el sistema barato, pues día a día crecen y se multiplican; esto otro es con el señor director de Tránsito, si es que existe: hay un convenio vigente entre el Tránsito y los propietarios de camiones para estacionar sus vehículos en la calle, creo que 19 A o B, la de la caseta Aguardiente Antioqueño que ellos están incumpliendo y haciendo lo que les da la gana estacionando en el Parque de Los Varaos o del Colesterol, que es prohibido y por ahí no se puede transitar. Haga cumplir la ley.

Por José Aponte Martínez

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