Las mujeres del Cesar, como las del resto de Colombia, han participado significativamente en los procesos de construcción de sus sociedades porque además de su presencia en la producción material y espiritual han sido gestoras del funcionamiento de las estructuras familiares, las relaciones personales y el cuidado de la vida.
Consecuentemente, las mujeres han sido protagonistas de múltiples procesos que han llevado a la conformación de lo que hoy reconocemos como el departamento del Cesar, contribuyendo a la creación de las culturas nativas que se establecieron y aportando su ‘granito de arena’ en la creación de la Junta Directiva de la creación de la región. Aunque el número de féminas no fue alto, sus roles fueron significativos.
Además de convertirse en animadoras y entusiastas, hicieron parte de la sesión inaugural de la Junta Directiva para la creación del departamento. Esta primera acta se realizó en los estudios de Radio Guatapurí; entre las mujeres presentes se encontraban Josefina de Castro, Celia de Olivella, Omaira de Castro, Adelaida de Castro, Delfina Olivella, Rosa Manosalva, Rubiela de Uhía, Libia de Gutiérrez, Yolanda Cuello, Eusebia de Ustáriz, Imelda Araújo, Rosa de Molina, entre otras.
“El aporte de las mujeres fue realmente secundario porque en los comienzos del departamento estábamos saliendo de una época feudal, aunque no hemos salido totalmente de eso, pero las damas eran las jefes de hogar y las colaboradoras de sus esposos en todas las actividades”, expresó Simón Martínez, antropólogo e historiador de Valledupar.
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Es muy importante destacar que para esas fechas (1966) se conformó el comité de apoyo, que era liderado por Josefina de Castro, quien figuraba como la representante de la cooperación femenina. Al constituirse la junta promotora del departamento, la presidencia quedó a cargo de Crispín Villazón y la segunda vicepresidenta fue para de Castro. Por su parte, el comité de finanzas fue presidido por Celia de Olivella, de Codazzi Cesar.
De esta manera se nota que en el transcurso de los años las mujeres no solo han aportado sus conocimientos a los cuidados del hogar, sino también a la construcción de sociedades; sin duda alguna, diariamente vemos cómo la participación de este género ha ido en ascenso en diferentes áreas. Por tanto, la invitación es a seguir trabajando por la lucha del reconocimiento de los derechos de la mujer, valorar su incidencia en la sociedad y que el respeto erradique el machismo.
INNAUGURACIÓN DEL DEPARTAMENTO
Al hablar sobre la inauguración de este departamento es necesario mencionar a la mujer, que con su esfuerzo y dedicación logró convertirse en la secretaria operativa de todo este proceso. Cecilia Villazón fue la encargada de mantener los libros, contabilidades y registro de las personas que hacían donaciones para los gastos que implicaba las movilizaciones y publicidad.
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Martínez contó a EL PILÓN que el 25 de noviembre de 1967 Cecilia, junto a 10 mujeres más, organizaron un comité femenino juvenil, encargado de hacer un censo de alojamiento en Valledupar debido a la ausencia de hoteles en la ciudad. Por medio de ese sondeo se evidenciaron las viviendas donde podían recibir visitantes que llegarían a la inauguración del departamento.
UN ESPACIO PARA LAS MUJERES
En aras de exaltar las labores que durante años han ejercido las mujeres en el departamento, la plataforma de Diálogos Improbables del Cesar quiere abrir un espacio para demostrar que con acciones y diálogos se puede llegar a terrenos comunes sobre diversos temas.
Así mismo, Ángela Cortés, miembro de la organización, informó que será una oportunidad para mostrar la metodología de diálogo improbable a la ciudadanía y despertar la corresponsabilidad, sumando a otras personas como cooperadores y practicantes del diálogo.
Por: Ketty Gutiérrez Maestre/EL PILÓN