Entrar al centro de Valledupar por la carrera octava con calle 17, o caminar un poco más por la carrera 7A con calle 18, es incómodo e intransitable. A simple vista es notorio que los andenes que le corresponden a los peatones están invadidos por vitrinas, juguetes, zapatos, artículos de belleza, correas, bolsos, colchones, camas, venta de jugos entre otros.
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Circular por el centro de la ciudad también es demorado, pues el flujo vial es lento, la invasión del espacio público por el comercio informal reduce las vías y dificulta la movilidad. Además la mala utilización del espacio por conductores de vehículos en el sector de la Galería Popular, es otro punto preocupante. No hay cultura vial ni ciudadana.
Por esta zona la obstaculización del área peatonal y vial es mayor, ya que un significativo número de motos se parquean en los dos carriles de la calle, torpedeando y reduciendo las vías. Las ventas de fritos, los puntos de comidas improvisados detrás de la Galería y las carretas de frutas y verduras se tomaron las calles céntricas de la ciudad sin que hasta el momento exista quien ordene el caos. Conducir un automóvil por estas calles es difícil; muchos prefieren pagar transporte a usar su auto y no tener donde parquear o quedar atrapados en un trancón.
Pero no ocurre solo en el centro de la ciudad; la vía principal del barrio La Nevada, la calle 23 de los Fundadores, el Mercado Público y la Avenida Simón Bolívar, son algunos de los sectores donde la invasión por parte de la informalidad se convirtió en una problemática.
Frente al tema de invasión de vehículos al espacio público, el secretario de Tránsito, Roberto Daza, manifestó que la recuperación del mismo debe ser en comunión con otras entidades: “La semana pasada estuvimos haciendo presencia en la entrada principal de La Nevada, la próxima estaremos abordando el corredor que comprende la carrera séptima, desde La Galería, pasando por Cinco Esquinas, hasta llegar al Éxito“.
VENDEDORES Y ESPACIO PÚBLICO
En un recorrido que realizó EL PILÓN por zonas de la ciudad, los vendedores informales dieron a conocer sus opiniones en cuanto a esta situación. Fabián Cruz es un vendedor de correas y billeteras, su mercancía la exhibe en un mostrador improvisado de madera y todos los días se ubica en la carrera séptima con calle 17, frente a la Droguería Libertad, entre la vía peatonal y la entrada del local; este ejercicio lo ha realizado por más de 37 años. Él dice que han pasado alcaldes tras alcaldes y nunca les han brindado una solución radical ni la reubicación.
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La queja generalizada de los vendedores del comercio informal es que les han prometido una reubicación que nunca llega. Explicaron además que la mayoría de ellos tienen más de 20 años de estar vendiendo sus artículos en la zona peatonal, pero las administraciones, según los comerciantes, no cristalizan un acuerdo. Los vendedores móviles, como ellos prefieren ser llamados, cuentan con una asociación creada hace 22 años, la cual ha pedido a más de 8 administraciones un traslado justo.
Francisco Valle es el vicepresidente de la Asociación de Vendedores Móviles Estacionarios de Valledupar (Asovemev). Tiene más de 30 años de pertenecer a este gremio. “Pedimos la presencia de Espacio Público, porque estamos desorganizados y queremos ponernos de acuerdo con los entes pertinentes para la regulación y reubicación“.
Por su parte, el jefe de Oficina de Espacio Público, Manuel Mercado explicó: “Este es un trabajo en grupo y hasta el momento la Alcaldía no cuenta con el dinero para las contrataciones, solo hasta la semana pasada empezaron a organizar esta parte y pienso que para el mes de abril ya estaremos al frente de esta situación“.
También manifestó: “En las administraciones pasadas los funcionarios fueron flexibles con esta situación, esta vez lo que se quiere es organizar todas estas zonas, a los nuevos se les desaloja y se les decomisa la mercancía, a los antiguos, los cuales están organizados y cuentan con una asociación, se les reducirá solo un 50 % del producto”.
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Desde enero no se censan estas zonas, razón por la cual ha subido el número de trabajadores informales. Administración tras administración han intentado acabar con la informalidad, ofreciendo una reubicación a los vendedores, pero hasta el momento según los comerciantes todo ha quedado en espera de la solución.
Días atrás, en una entrevista para EL PILÓN, el alcalde de Valledupar, Mello Castro, anunció que se tiene planeada la obra de la Plaza de Ventas, “con una inversión de más de $60.000 millones de pesos. Lo que se busca es organizar a todos los vendedores que tenemos en el centro y demás zonas de la ciudad y reubicarlos en la plaza. La Galería se quedó corta. Buscamos construir la plaza en el lote del Idema, frente a la estación de los Aroca, lo cual daría vida a ese sector”.
Por Katherine Sarmiento Torres.