Una sola palabra define el sentimiento de los colombianos con el triunfo de la Selección Colombia: júbilo, así como dice la primera estrofa del Himno Nacional: ¡oh gloria inmarcesible, oh júbilo inmortal!
La historia que ayer escribió el equipo colombiano al pasar por primera vez en la historia del fútbol colombiano a cuartos de final en un Mundial es gratificante para pensar que la unidad nacional mostrada por nuestra Selección y el pueblo, puede constituirse en fuerza inmarcesible para alcanzar otros triunfos y servir de referente para mejorar la situación del país.
El fútbol que práctico ayer Colombia fue excelente. No sólo ganó el partido, sino que ratificó el buen momento del equipo colombiano. Tiene el mejor jugador del Mundial, el mejor gol, la valla menos vencida, el mejor comportamiento colectivo, está entre los equipos con más goles a favor y el jugador que hecho más goles en esta Copa del Mundo.
Hizo Colombia su ‘maracanazo’, un triunfo que le abre las puertas a un nivel que nunca antes habían logrado las selecciones que precedieron a esta. El partido frente a Uruguay fue una hora de puro fútbol y media hora de puro Coraje, como lo han calificado los expertos. El triunfo fue colectivo, pero cada área tuvo su liderazgo. David Ospina en la portería con su estrategia ubicación bajo el arco, James Rodríguez como la fuente de producción, Teofilo Gutiérrez la ficha estratégica en medio de férreos defensores, Juan Guillermo Cuadrado con la plasticidad para desequilibrar al contrario, Jackson Martínez el goleador que distrajo la marca para que no subiera al campo colombiano, Abel Aguilar y Carlos Sánchez fueron la contención del desdoble uruguayo, Mario Yepes, Cristian Zapata, Camilo Zúñiga y Pablo Armero los pilares que neutralizaron la ofensiva charrúa.
Un equipo avalado estratégicamente por José Pekerman, que ratificó su vasta experiencia mundialista, al mover las sustituciones como fichas de ajedrez para neutralizar definitivamente la reacción del equipo de Tabares en los últimos momentos del partido.
Ganamos. Pasamos a Cuartos de Final. Colombia vibra de alegría y proyecta esperanzas frente a la Selección de Brasil, anfitriona y pentacampeona del Mundo, el próximo viernes. Más vale nacer y ser, que haber nacido siendo.