Al hablar de este tema es preciso hacer una pasajera o breve reseña histórica de lo que fue el cultivo de arroz que por primera vez en le región se cultivó en la zona donde es hoy el municipio de Distracción hacia el año 1940, por los ingenieros alemanes Herman Everlein y José Trasler, preparando 2 hectáreas pero pronto fueron amonestados por vecinos quienes les formularon seria acusaciones como la de querer construir una pista de aterrizaje cuando apenas preparaban la tierra para el cultivo, dichos señores fueron privados de la libertad y recluidos en el antiguo Batallón del Ejército ‘Rondón 2’ acantonado en Buenavista, al salir en libertad continuaron con su proyecto y así se hizo el primer cultivo de arroz en la región.
En el año 1946 el cultivo se extiende a la provincia de Valledupar y el primero en desarrollarlo fue el doctor Alfonso López Michelsen en la hacienda el Diluvio hoy propiedad de los hermanos Molina Araujo.
Al día de hoy, después de tantas vicisitudes en el cultivo de arroz, debemos resaltar que la institución Fedearroz quien ha cumplido sus 60 años como seccional tiene una fortaleza admirable gremial, situación que la ha conducido a un crecimiento muy positivo que le da esperanza y confianza al manejo del cultivo, siendo hoy un producto de tipo empresarial para lo cual ha tenido una fundamental laboral gerencial de parte del ingeniero agrónomo Hernán Aramendíz Oñate en su regencia de 38 años, y claro, con el respaldo solido brindado por la administración central y la acertada dirección del doctor Rafael Hernández Lozano. El ingeniero Hernán Aramendíz se vinculó a Fedearroz seccional Cesar, en febrero de 1980 siendo gerente general Bernardo Tello Quijano con la venia del doctor Álvaro Araujo Noguera quien había sido ministro de agricultura en el gobierno del doctor López Michelsen.
La vinculación del ingeniero Araméndiz fue bien recibido por el comité de arroceros de Valledupar siendo presidente el doctor Dagoberto Poveda.
El trabajo de esté agrónomo tuvo destacado desarrollo en el área de influencia de la seccional, tales como zona norte y centro del Cesar así como en el sur de La Guajira, donde contó con el ahínco del señor Lacides Ovalle Pitre quien fue decisivo para su éxito. El doctor Araméndiz Impulso grandes desarrollos para los arroceros en la región entre otros: oficina y almacén moderno en Valledupar, punto de servicio en Fonseca, mejoramiento en la planta de semillas en Valledupar, investigación y trasferencia de tecnología, portafolio de agroquímicos propios, apoyo a la comercialización con la nueva planta de secamiento y almacenamiento para lo cual tuvo invaluables servicios de apoyo de Campo Elías López Morón, Joaquín Tomas Ovalle y Alma Castro Saumeth.
Los logros obtenidos por este hijo de Valledupar, constituyen un verdadero buen ejemplo para su profesión.
Por *Hernán Maestre Martínez
*Especializado en gestión ambiental.