Uno de los compromisos pactados en los diálogos de paz con la guerrilla de las Farc fue su participación política. Para eso, y en un proceso de transición, el Estado colombiano estableció 10 curules para el partido que surgiera: 5 en el Senado y 5 en la Cámara de Representantes. Victoria Sandino es una de las cinco senadoras del partido Farc.
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En su visita al departamento del Cesar, la senadora habló sobre estos cuatro años desde que se firmó el acuerdo, los desafíos de seguridad y el futuro político.
¿Cuál es el propósito de esta visita al departamento del Cesar?
En principio tenía el objetivo de realizar una asamblea con los compañeros y compañeras del territorio, en el sentido de las dificultades que hemos tenido en materia de seguridad, de reincorporación e implementación del acuerdo de paz. Se visitarán los dos espacios (Pondores y Tierra Grata). También nos reuniríamos con plataformas juveniles y alcaldes para hacer un balance de la implementación del acuerdo, de los PDET, entre otros temas.
Esa era nuestra agenda, pero anoche (miércoles) cuando estábamos en el preparativo recibimos la noticia de que los compañeros de Tierra Grata, exactamente toda la junta directiva del Espacio Territorial, fueron amenazados por el Clan del Golfo. Se recibió esa información y se pusieron las respectivas denuncias ante las autoridades.
Lamentable, el Cesar se destacaba por ser uno de los territorios más seguros para los excombatientes
Contábamos con la fortuna de no tener problemas de seguridad. En el Cesar y un poco La Guajira, no había pasado nada que lamentar. Esperemos no tener que lamentar nada con nuestra gente en este territorio. Hay un estado de mucha alerta, nerviosismo y miedo en la comunidad. Estaremos tocando las puertas de las autoridades departamentales y municipales para mirar cuáles son las acciones que adelantaremos en el territorio.
¿Cómo fueron las amenazas?
Al presidente de la junta directiva del Espacio le dieron 24 horas para que saliera del Cesar. Las amenazas las han hecho por llamadas. La del presidente no la tenemos porque no se tuvo la precaución de grabar. A los demás sí se les grabó porque los llamaron uno por uno. Los están citando a una reunión y si no se tienen que ir.
¿Qué dicen las autoridades?
Recién hicimos la denuncia ante la Fiscalía, ninguna autoridad se ha trasladado.
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Afectan estas intimidaciones la unión y la tranquilidad de la comunidad…
Aquí hay varias cosas, una es dialogar con la comunidad porque esto nos preocupa muchísimo. Si algo valoramos nosotros es que la comunidad de Tierra Grata se haya mantenido organizada trabajando, y sin problemas de seguridad. Los problemas son de otra índole, no hay tierras, todos conocen cómo han luchado para contar con el agua y la energía.
Hay un arraigo con el territorio y ahora se presenta esta amenaza. Nos preocupa muchísimo la seguridad de los compañeros y compañeras y preocupa también que las personas salgan despavoridas.
Lo primero que le hemos dicho al presidente es que no salga de la comunidad, que espere que hagamos todas las gestiones. Esperamos y confiamos en la diligencia de las autoridades competentes, que den las garantías.
¿Cree que uno de los propósitos es sacarlos del territorio?
Nada raro sería. Así empiezan, los están convocando, les están diciendo “váyase usted”, “tiene 24 horas para irse”.
Sin duda, la seguridad es una de las preocupaciones más grandes de la implementación…
Ya vamos para 250 excombatientes asesinados. Nosotros organizamos un proceso de movilización que le llamamos peregrinación hacia la capital de Bogotá, incluso una delegación se reunión con el presidente Duque y se comprometió al cumplimiento del acuerdo y las garantías de seguridad, pero en la práctica no es así de fácil y aquí tenemos los resultados. Estos hechos han prendido todas las alertas. No puede ser que a quienes apostamos por la paz se nos aniquile de esa manera. No tenemos palabras para nuestra gente. Yo vengo a decirles: “Compañeros aquí nos toca resistir”, pero amenazan a toda la directiva.
Por encima de los problemas de seguridad ¿qué avances se han logrado y qué se aspira alcanzar?
¿Qué hemos logrado en esta comunidad en particular? Hemos logrado que las personas se mantengan, han adquirido un territorio allí en Tierra Grata, para realizar su proyecto de vivienda. El mayor desafío es alcanzar esos recursos. La gente ha puesto sus $8 millones, que corresponden por lo pactado, y a partir de allí se está en gestiones para conseguir el resto de recursos que hace falta para el proyecto.
Las personas se preguntan por qué no hacer un proyecto productivo de ganadería, de maíz, de arroz. Es que la gente nuestra considera que la garantía que la comunidad permanezca es una vivienda. Después que haya vivienda, se puede ir a trabajar. Esperamos contar con la Gobernación y las alcaldías.
Es prioridad la vivienda…
Casi todos tienen familias, hijos… la vivienda es prioridad, y después seguir peleando por lo demás, el que tiene vocación agropecuaria, las cooperativas, justo vamos para una reunión con las cooperativas.
La pandemia ha golpeado con fuerza a los proyectos productivos…
Absolutamente. Difícil porque todos los procesos han tenido que parar. Nosotros apenas estamos retomando después de este periodo de pandemia, pero estas intimidaciones fracturan todo porque la gente no se querrá quedar en el territorio si no tiene la confianza y la seguridad y la certeza de que no le pasará nada.
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¿Separados no son más vulnerables?
¿Y qué pasa? Cuando las personas se van del territorio, más vulnerables son. Uno a uno, ¿quién garantiza la protección?
¿Entonces la unión es garantía de seguridad?
Sí, pero no es la única garantía porque en otros territorios, estando en la comunidad, los asesinaron. A un compañero de Mesetas lo mataron en su vivienda en el Espacio Territorial. No es una cosa fácil.
Hablemos de las comparecencias de las FARC ante la JEP… Podría decirse que han causado polémica las versiones entregadas por el partido.
No hay cuestionamiento del compromiso de las Farc, a tal punto, que con el fin que se sepa toda la verdad y no se especule sobre lo que se viene diciendo en la JEP, se ha pedido que esas declaraciones sean públicas. Eso no estaba dentro del acuerdo.
Se crítica porque la comandancia, a quienes han llamado a comparecer, ha dado declaraciones y ha reconocido hechos que nadie conocía. Situaciones como la del señor Álvaro Gómez, con más de 25 años sin resolver, y ahora cuando las Farc señala que somos responsables, lo cuestionan.
Tema álgido de la última semana fueron los audios del caso Santrich…
Quedó en evidencia el montaje burdo, el intento de entrampamiento contra Jesús Santrich. Pero el tema no era contra Santrich, en los audios que ha mostrado la prensa queda en evidencia que era contra el acuerdo de paz, contra el jefe de la delegación de paz de las Farc, Iván Márquez, y para ello presentan audios falsos, de supuestos Iván Márquez. Eso se cae por su propio peso. Esa no era la voz de Iván.
El montaje también iba en contra del general Oscar Naranjo, que era el vicepresidente, firmante del acuerdo de paz; iba contra Iván Cepeda, Piedad Córdoba, ministros. Es un atentado contra el acuerdo de paz orquestado desde la Fiscalía en cabeza del señor Néstor Humberto Martínez. Y ahora nosotros vemos todo lo que ha ocurrido posterior a esos hechos.
Un sector de las FARC regresó a la guerra…
Yo no justifico su ida, creo que no debieron marcharse, pero entiendo las circunstancias que han tenido que enfrentar. Yo sé que no soy culpable de nada y lo único que me garantizan es una cárcel en Estados Unidos…
Por último, hablemos del futuro, de la participación política…
Le miento si no le digo que tenemos dificultades enormes. Un partido naciente y que está invirtiendo todos sus esfuerzos en mirar cómo protege a su militancia, es difícil que pueda hacer política de verdad, como un servicio social.
Lo poco o mucho que hacemos en el Congreso de la República está ligado a defender el acuerdo, a desarrollar una labor de control político, pero, repito, están los problemas. Por ejemplo, hoy teníamos planeado hablar con la comunidad, porque como congresista esa es nuestra labor, pero ahora tengo que atender el tema de seguridad.
¿Cuál es la proyección para el 2022?
Nuestra apuesta es que se consolide un gobierno alternativo que apueste por la paz, al cumplimiento de lo pactado. Ninguna fuerza tiene la capacidad para de manera individual, sin alianzas, alcanzar el objetivo, inclusive la extrema derecha.
Por Deivis Caro/EL PILÓN.