CORTÍSIMO METRAJE
Por Jarol Ferreira
“La comprensión no es gratis”.
Noam Chomsky
1. Las campañas en pleno fueron un concurso de ruido. Sus propagandas, en busca de ser persuasivas, se agolparon en una sinfonía atonal que creció a medida que se acercaba la hora de cierre. Un carro empezaba su melodía de vallenato apológico de candidato e irrumpían, a destiempo, las de los otros concursantes. En la diaria pugna por el territorio, los batallones del ruido exiliaron al silencio. Ciudades y pueblos fueron testigos de su destierro.
2. La caminata terminó su recorrido. La masa de curiosos y simpatizantes, que inicialmente permaneció compacta, poco a poco se disgregó entre las calles y se perdió hacia múltiples destinos. Algunos fueron acogidos por los carruajes de las moto taxis, otros aprovecharon el aventón de algún participante, con carro y ruta cercana a su residencia, para irse en chance. Una minoría se quedó parqueada en las esquinas cercanas al punto de llegada, comentando con optimismo sus percepciones sobre lo que fue la marcha.
3. Política: Individuos con expectativas similares. Gente que trabaja y espera. Personas que sueñan sin dormir. Personas que suman.
Política: candidato aportando a la canasta familiar de una avivata. Agradecimientos, promesas y la voz aguda de un seguidor que ansía la atención un líder.
Política: capitalismo burocrático. Aspirantes puerta a puerta pidiendo votos. El elector hace rogar al elegible, por un: Si. (Poder efímero). Aspirantes a votos y votantes con aspiraciones. Administradores de recursos. Mercado de simpatía. Industria de ilusiones.
Política: un picó remolcado por una camioneta entre las calles. Riña de gallos. Candidatos que vuelven y revuelven manzanas cansadas de mensajes.
4. Las propagandas terminaron ante el fin del lapso concedido y un río de gente se esfumó hacia su realidad individual. Se bifurcó, se evaporó entre paredes desconchadas y andenes rústicos. Pero todavía no termina el proselitismo: en silencio continúan las visitas promocionales y las reuniones estratégicas. Exhaustos ahora descansan para estar en pie mañana antes de que amanezca.
5. Reportan pérdidas, como expresión democrática, estas campañas. Ruidosas campañas en las que ha estado ausente el pueblo, que no camina si no recibe una camiseta, una cachucha, o al menos una visera. Se le quiso involucrar con empalagosas tácticas: Médicos especialistas, cantantes vallenatos, cursos de manualidades, juegos infantiles, rifas y otras estrategias que sirvieron como mecanismos de mercadeo. Medios impresos, radio y televisión fueron voceros de los mensajes de los aspirantes que a diario ocuparon sus titulares; sin embargo no lograron interesar al grueso popular, que no confía en lo que oye ni en lo que ve. Exceptuando a los involucrados directamente en los movimientos políticos, a la gente le da lo mismo quien pueda llegar a ser su próximo gobernante. El pueblo está resignado (se ha equivocado tanto).
jarolferreira@gmailcom