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“A las EPS se les acabó la guachafita”: Supersalud

El superintendente escuchó las quejas de los pacientes de las diferentes EPS en Valledupar.

El superintendente dijo que está tomando medidas para devolverles a los usuarios la salud.

Un relicario de quejas acompañado de rabia, llanto e impotencia fue lo que se vio en la reunión que sostuvo el superintendente de Salud, Fabio Aristizábal Ángel, con los usuarios de las EPS en el auditorio Luis Rodríguez Valera de la Gobernación del Cesar.

Fueron muchas las quejas, por lo que el superintendente fue enfático en afirmar que a las EPS se les acabó la “guachafita”, para ello está tomando decisiones, de las cuales varias van a impactar en el Cesar.

“A las EPS les digo que la guachafita se acabó y cuando digo que la guachafita se acabó es porque empezamos a tomar decisiones muy rápido”, explicó, al tiempo que afirmó que tiene clara la situación de los hospitales en el Cesar refiriéndose a lo que ocurre hoy con el hospital San Andrés de Chiriguaná y Rosario Pumarejo de López en Valledupar.

Durante la reunión que sostuvo en la mañana con usuarios de diferentes EPS las quejas más reiterativas fueron contra la Nueva EPS, Coomeva y La Preventiva.

Se escucharon casos como el de una señora quien fue en representación del nieto, el cual desde los tres años espera por una cirugía para poder caminar bien, pero en el 2019 cumplirá once años y pese a los fallos de tutela y desacato de las mismas no ha logrado que la Nueva EPS le ordene una cirugía que le permita llevar una vida normal, por lo que esta situación le ha afectado su parte emocional.

Vestidas de blanco con un lazo negro del lado izquierdo estaban las madres de los neonatos muertos por la aplicación del medicamento Survanta en la Clínica Laura Daniela; ellas le pidieron al superintendente que no se olvide del caso.

“La revolución se dio por la postura del medicamento, pero la Clínica se ha empeñado en querer engañar a la comunidad diciendo que ellos no fueron los culpables… Cuando uno ingresa a una clínica lo hace buscando salud, nosotros en este caso obviamente no teníamos ni idea que una entidad con tantos años como es la Clínica Laura Daniela le iba a colocar un medicamento adulterados a nuestros hijos. El Invima dijo una vez en una comunicación que el medicamento estaba en tan malas condiciones que no podía ser aplicado a seres humanos…por eso agradecemos a usted, a la Supersalud que es la única entidad que ha hecho algo por las sanciones que ha impuesto, aun cuando en su momento nos ha parecido irrisorio, porque fue un hecho gravísimo y qué no sabemos aún si sigue pasando”, dijo una de las madres en la reunión.

Denunció que se ha hablado del medicamento Survanta, pero que existe otro sobre el cual han denunciado ante la Secretaría de Salud Departamental pero no han hecho nada.

Ante la petición de las madres, el superintendente le dijo que cuando llegó al cargo encontró un hecho cumplido, pero le hubiese gustado haber sido él quien hubiese hecho la investigación para imponerle la máxima sanción a la clínica.

Aristizábal Ángel aseguró que la ley que presentó al Congreso con el que busca fortalecer la entidad tiene entre otros objetivos contar con herramientas pasa endurecer las sanciones.

“Vine a solucionarle un problema a los colombianos, pasamos un proyecto de ley precisamente para endurecer las sanciones, le voy a devolver la confianza a ustedes, la vida, la salud, no estoy mirando para atrás, estoy enderezando poco a poco”, aseguró.

Manifestó que está corrigiendo las cosas, que se está llenando de argumentos para poder liquidar y que no solo lo hará con las EPS sino con las IPS tanto públicas como privadas.

“Conozco perfectamente lo que está pasando, aceptó que tenemos problemas en la Superintendencia, pero estamos montando un software nuevo. Estoy trabajando en fortalecimiento regional, claro que quiero tener funcionarios acá”, mencionó.

Durante la reunión se escucharon quejas por la demora en los medicamentos, debido a que en los dispensarios no se los entregan completos, sino que les dan bonos de pendientes que duran hasta un mes para que el paciente pueda tener los fármacos completos.

También hubo quejas por las demoras en remisiones a especialistas, fallas en entrega de medicamentos no POS, traslados a otras ciudades sin cubrir los gastos para hospedaje, transporte interno y alimentación.

Yeidis Guerra por ejemplo afirmó estar cansada que en entidades como Cajacopi no le resuelvan nada respecto a su hijo de cinco años que presenta una alergia y después de muchas luchas logró que se lo remitan a Barranquilla, ciudad en donde no tiene familia y le preocupa los gastos en los que pueda incurrir, debido a que no tiene dinero porque no cuenta con trabajo en este momento.

Diego Vives fue otro de los quejosos, quien llegó a denunciar el caso de su padre que falleció esperando un traslado por parte de La Preventiva, además de las demoras en esa EPS para autorizar un medicamento y realizar cualquier tipo de trámite.

También denunciaron que hoy la salud en Valledupar es un monopolio en cabeza de los hermanos Arce, y otros hechos como que no le paguen a los trabajadores tanto de clínicas como de hospitales.

SANEAMIENTO FINANCIERO

Al finalizar la jornada, el superintendente dijo que se va con algunas preocupaciones, porque encontró EPS en nivel crítico que están afectando a los hospitales tanto públicos como privados, por lo que va a priorizar unos hospitales para llevarlos a un plan de saneamiento financiero.

De igual modo, anunció capacitación a secretarios de Salud para darles más herramientas; mesas de flujo de recursos para analizar la contratación, la liquidación de contratos anteriores y la forma en que están contratando ahora.

He sido muy claro con las EPS, le hemos dado tiempo: las EPS que tengan voluntad de permanencia, que muestren cómo van a capitalizar, que me muestren voluntad de pago, que disminuyan peticiones, quejas, que demuestren que tienen red, pero lo que se evidencia acá es que no tienen red primaria, no tiene red de segundo nivel y aun así siguen funcionando”, recalcó Aristizábal Ángel.

Afirmó que el tema de Coomeva es preocupante porque tiene muy poca población para tantas quejas. “Yo tenía claro que eran 73 mil afiliados, la gerente dice que son 40 mil, porque una EPS con 40 mil debe funcionar perfecto”.

Por Sandra Santiago B. / EL PILÓN
Sandra.santiago@elpilon.com

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