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¿Por qué ya no se hacen canciones como antes?

Sobre esto se ha especulado mucho, en el foro virtual que hizo la finada Lolita Acosta (q.d.e.p) yo expuse que el asunto obedecía a que estábamos en escenarios distintos, motivos distintos, tiempos distintos, lamentablemente esto se tomó a pie y juntillas, sin discernir y empezaron a repetirlo tal cual, igual que cuando dije: que si no se hacía algo por el vallenato nos pasaría igual que con la música mexicana, lo que sale de uno vuelve a uno, algunas personas me dijeron eso a mí y les pregunté y ¿Qué fue lo que pasó con la música mexicana? Bueno que se murieron los grandes y si muere Vicente Fernández hasta ahí llegó. Eso fue lo que yo dije. Pero no es del todo cierto y no lo dije por tomar el pelo, lo que pasa es que con el tiempo el entendimiento se amplia.

Lo que pasó con la música mexicana fue que apareció una “nueva ola” liderada por César Costa, Enrique Guzmán, Angélica María y Alberto Vásquez, estos eran jóvenes de buen físico con talento y vestían a estilo universitarios de Harvard y manejaban en sus películas carros convertibles y bailaban Twuist y Rock and Roll, con algunas baladitas con letras almibaradas de romances rosas, empezaba la era de los Beatles y los mechudos mandaron al charro estereotipado para el rincón de los oyentes fieles, las películas empezaron a filmarse en cinemascope y todo color, entonces los charros no lucían a lo mero macho, bien definidos en sus rasgos por el maquillaje blanco que le colocaban para que en la película blanco y negro proyectara su perfil con rasgos finos y las “Lolas” no lucían tan angelical a todo color; en cambio los pelaos salían como diría Cantinflas a: “Todo dar”, palideció el cine de los Charros cantores, hoy en día los Dandi de la nueva ola mexicana son unos abuelones canosos y México solicitó a la Unesco, protección para su patrimonio: “La ranchera” y la nueva ola “Nanay cucas”, siempre pasa así cuando llega una moda, no queremos que les vaya a pasar lo mismo a nuestra nueva ola.

Por eso pienso: No es posible que algunas personas por no dar su brazo a torcer no acepten que si hay nuevos aires que podíamos incorporar al patrimonio puesto que los patrimonios no son estáticos, es increíble ver que Juancho Rois perdió la corona porque innovó al momento de su actuación, lastima hoy día todo es igual, no creen ustedes que estamos cayendo en contradicciones históricas, solo por mantener una postura.

¿Por qué la guabina y el bambuco o mejor dicho la música colombiana quedaron ocultos? Porque apareció en Colombia también una nueva ola, liderada por Oscar Golden, Jesús David Quintana, Claudia de Colombia, Isidora, Billy Pontoni, Cristofer, Vicky, Ana y Jaime y mandaron a ‘Los guaduales’ para el rincón del oyente fiel, los tolimenses, santandereanos han tardado en buscar protección para su música. Pero cuando se haga la nueva ola del interior del país no entrará.

Por eso les pido a los pelaos mejoren sus letras, póngale nombres a su ritmos, ustedes no están acabando el vallenato; ni lo han acabado ni lo van acabar, ustedes con su talentos, carisma y sus nuevas formas son un riesgo para nuestra música tradicional, eso si es verdad. Pero aun así, el Plan de Salvaguardia no se hizo para frenarlos a ustedes, la gente a mal interpretado todo y hay persona que por puro y físico orgullo por tener que reconocer que no saben, y de paso reconocerle a unos que tenemos cierta información, no preguntan.

Al retornar al consultorio de mi Urólogo, me comentó algo que me puso a pensar otra vez y que complementa esta columna, es la forma como están ustedes componiendo, unos toman un pedacito de cada canción y la modifican hasta armar una tela de araña en melodías y luego viene la letra. ¡Claro! Por eso se están alejando del sentimiento real, de la cadencia original del vallenato, por eso se sienten vacías. Es fácil lo que ustedes sientan que no es vallenato y tiene melodías de otras músicas colóquenle: “Fusión” lo que buscamos es preservar la identidad hay gente que no comprende esto y de manera irresponsable dicen: ¡A Dios Chendo dejá está! Yo con esos pelaos no me tomo ni un Dolex. No, en lugar de criticarlos, aconsejémosle, ya ellos tienen que estar azules de tanta lengua que se les ha echado y la verdad es que ellos están cantando su propia manera de hacer vallenato y de ver la vida, sin que esto quiera decir que no deban mejorar. El reguetón, la música Urbana y la fusión llamada Tropic pop, son otra cosa.

Los recursos que se toman por internet, bueno llamémosle a eso “taller” si, háganlo. Pero, adáptenlo a nuestros aires, que gane el vallenato, no que pierda.

Por Rosendo Romero Ospina

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