Con beneplácito y tranquilidad, recibieron los guajiros, el anuncio de la firma de convención colectiva de trabajo, que regirá para los años 2016 y 2017, entre Cerrejón y su sindicato mayoritario Sintracarbón, lo que pone fin a la tensionante situación de una posible huelga.
Con este acuerdo quedó subsanado el conflicto laboral que inició el pasado 18 de diciembre y se ratificó la voluntad de las partes para entenderse por la vía del diálogo y la concertación. La nueva convención mantiene y aumenta los beneficios a los trabajadores a pesar de las dificultades que presenta el mercado del carbón.
Con la firma de esta nueva convención cada beneficiario recibirá, $7.200.000 de pesos correspondientes a los dos años de la vigencia y el adelanto del bono trimestral de productividad por el primer año, para un total de $10.581.472.
El aumento salarial será del 7% para 2016 y para el 2017 será del Índice de Precios al Consumidor, IPC, + 0,23%. También hubo acuerdos con relación a los auxilios educativos y la prestación de los servicios de salud.
“Agradezco a las equipos de la empresa y el sindicato mayoritario por llevar a cabo la negociación en un ambiente de respeto y cordialidad. Este acuerdo a dos años nos permite enfocar todos los esfuerzos en hacer los ajustes requeridos en productividad y costos que nos aseguren la viabilidad durante la crítica situación que está viviendo la industria y la compañía”, comentó Roberto Junguito, presidente de Cerrejón, quien también agradeció, los buenos oficios del Ministerio de Trabajo, que brindó un importante acompañamiento para facilitar acercamientos entre las partes y un cierre exitoso del proceso.
Por su parte, las directivas de Sintracarbón, resaltaron la importancia de los trabajadores en el acuerdo porque los respaldaron en los momentos más críticos de la negociación.
El presidente de Sintracarbón, Jairo Quiroz afirmó que “para esta comisión negociadora, fue muy importante contar con su apoyo permanente, porque ha sido una de las negociaciones más atípicas que hemos sostenido. Estamos seguros que no será la última, pero sí estamos seguros y confiamos en que su fuerza siempre estará presente”.
Al firmarse la convención terminó la tensión en todos los municipios de La Guajira, porque con el cese de actividades de la mina de carbón también estaban en riesgo los negocios que se mueven en torno a la economía minera del departamento.
Por: Jesús Eduardo Ariño Fragozo
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