Y ADEMÁS…
Por: Alberto Herazo Palmera
Hace poco escuchaba, en una de las emisoras locales, tratar el tema de la Cárcel Judicial y sobre este tema se nos ha seguido “mamando gallo” por parte del INPEC. Hasta los mismos políticos, cada vez que hay una elección van al barrio Jorge Dangond y ofrecen gestionar el traslado de la Judicial para otro sector, pura paja, como dice la canción, pura paja.
Bendito problema el de la Cárcel. Siempre ha sido tema obligado. De vez en cuando se vuelve a agitar como papa caliente este problema. En cualquier país del mundo, violento o pacífico, su sistema carcelario es motivo de preocupación. Y lo es porque las autoridades deben cumplir su obligación de resocialización con la sociedad y con quien cae en el trágico mundo de la delincuencia, en un ambiente seguro, digno y responsable de los derechos humanos. Para nosotros no es ningún misterio o secreto que nuestras cárceles son escuelas eficaces del delito y algo más que eso. Este problema es eterno. Aquí, en nuestra querida Valledupar, hemos sido testigos de muchos penosos y vergonzosos episodios con hondas repercusiones para nuestra ciudad y en especial para los barrios Dangond, Las Delicias y Los Caciques. Hubo en esa oportunidad amotinamiento, retenciones de funcionarios de la Cárcel y agresiones a granel. Este es uno de los tantos episodios, acontecimientos desagradables y desafiantes del pasado reciente, no del todo superados. Igual ha ocurrido en La Tramacúa.
Muchas han sido las jornadas de protestas de estos reclusos cuyo tono de agresividad han ido creciendo vertiginosamente. Y con razón, por la degradación y hacinamiento a la que injustamente son sometidos los internos. A raíz de todos estos acontecimientos y los que están por venir es que sigo insistiendo en que hay que resolver el problema de la Judicial y su reubicación. Con eso se logra solucionar graves problemas y la misma tensión de los moradores de los barrios aledaños por las eventuales convulsiones sociales que pone y sigue poniendo en peligro sus vidas y bienes.
¿Cuál es el propósito? que se construya una nueva cárcel fuera de la ciudad que sea un ejemplo de lo que deben ser estos centros penitenciarios en el país y que se trasladen los recursos de la vieja cárcel a la nueva. Y además, construir en este sitio un parque hermoso que sería uno de los grandes pulmones que cada día más necesita la ciudad y venga a incrementar la calidad de vida de estos barrios. Es más, los niños del sector le podrían poner el nombre al parque a través de un concurso.
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Pero además…
Tengo una inquietud sobre la Central de Abastos, nadie habla sobre esta empresa. ¿Existe o no? Es una entidad cuyo objetivo principal es facilitar la comercialización de productos agropecuarios mediante el arrendamiento o venta a productores, industriales y comerciantes de una serie de bodegas y locales adecuados para la venta de dichos productos. Quisiera preguntarle al actual gerente si la entidad está cumpliendo con sus funciones o ha sido un elefante blanco como se nos quiere hacer ver.
Hace más de 30 años no se actualiza la nomenclatura de la ciudad, en muchas ocasiones es difícil dar con una dirección, sería bueno que Planeación le metiera mano a esto. No estoy de acuerdo a que a estos nuevos barrios se les estén colocando nombres de compositores de otros departamentos, aquí tenemos compositores que merecen este homenaje, por decir algo, Tobías Enrique Pumarejo, Freddy Molina y Octavio Daza, y – a propósito-, ese gran compositor Freddy Molina acaba de cumplir 40 años de fallecido, el gran ausente al homenaje que se le ofreció en Patillal fue la Fundación de la Leyenda Vallenata, pero – afortunadamente y gracias a Dios- no hicieron falta. Igual, hay que organizar los nombres de los barrios, aquí cualquiera hace 8 casas y le pone nombre al sector, creo que esto le corresponde a Planeación Municipal, entidad que cada vez que me refiero a ella me da dolor de cabeza.
Postdata
Cuando un gato ladra es perro. Creo que a nadie le resulta sencillo aceptar que un malabarismo verbal convierta el blanco en negro y el perro en gato, y esto está sucediendo con algunos funcionarios cuando tratan asuntos tan delicados de las administraciones.