Luego de que un juez penal de conocimiento de Medellín condenara a Nelson Velásquez Díaz a cuatro años de prisión por el delito de violación a los derechos patrimoniales de autor y derechos conexos, el cantante de música vallenata se pronunció a través de sus redes sociales y aseguró que seguirá trabajando y promocionando su música.
“Estoy contento, voy con toda. Vamos a luchar siempre, vamos a seguir trabajando, mostrando nuestra música. Nadie, solamente Dios el día que me quite la vida, el día que quiera llevarme o el día que me pase cualquier cosa, el día que diga: ‘Hasta aquí llegó, véngase para acá’. De resto hay Nelson para rato”, dijo el artista guajiro en un video publicado en su cuenta de Instagram.
Añadió: “Estamos felices, seguimos haciendo nuestra música y con todos los ‘Nelsistas’ de corazón y de la mano de Dios lo vamos a lograr”.
El caso
La condena se da luego de que Jair López, representante legal de Los Inquietos, demandara a Nelson Velásquez por interpretar, sin autorización, en conciertos las canciones que grabó cuando hacía parte del grupo de vallenato romántico, iniciando una batalla legal desde hace varios años.
Velásquez Díaz se retiró de la agrupación en 2004 para iniciar su carrera como solista. Según la Fiscalía, entre 2012 y 2018, Nelson Velásquez interpretó, como solista y sin la debida autorización, varias canciones de la agrupación musical. El fallo de primera instancia también le impuso una multa equivalente a 26 salarios mínimos legales mensuales vigentes, algo más de $20.8 millones.
Además, le concedió la suspensión condicional de la pena y estableció un período de prueba de 48 meses, previo el pago de una caución de un salario mínimo legal mensual vigente.
Nelson Velásquez apelará la decisión del juez y aseguró que está tranquilo. Además, cuenta con el respaldo de sus seguidores y varios compositores vallenatos que han dado autorización para que cante en vivo las canciones de su autoría que fueron grabadas por él cuando hizo parte de Los Inquietos.
POR: LUCÍA MENDOZA CUELLO/ EL PILÓN.