A raíz del informe que publicó este martes EL PILÓN, titulado ‘Tardeadas con sexo, drogas y alcohol en Valledupar’ (Haga clic aquí y léalo), hubo diferentes reacciones ante el hecho de que los adolescentes de esta ciudad estén siendo involucrados en el mundo de las drogas por parte de mafias que se escudan en dichos encuentros para mantener la comercialización de las sustancias psicoactivas.
La información exclusiva reveló detalles de las populares Tardeadas alarmando a autoridades y a la comunidad en general. A través de la emisora Maravilla Stereo hubo varios pronunciamientos sobre la irresponsabilidad de los padres, de las autoridades locales y las instituciones educativas. Entre los cuales se destacó el de María Rangel, habitante de la Urbanización Villa Dariana, que denunció como en su sector se han presentado estas polémicas fiestas.
“Vivo en un sector donde hay varios colegios públicos, en donde los profesores no dictan sus clases como deben ser y los niños salen temprano. Veo cómo una ‘manada’ de menores pasan por mi casa con unos pantalones pegaditos, encachuchados, a eso de las 2:00 de la tarde. El otro día pasaron más de 100 y venían de esas Tardeadas”, expresó.
Además afirmó, “todo eso proviene de los padres, de los principios morales que le radicamos a los hijos, porque yo tengo una sobrina de 17 años y esa niña ha ido a una sola fiesta en su vida y fue llevada por su papá, quien también la recogió en el mismo sitio donde la dejó”.
Afectación en vecinos
Las populares Tardeadas se realizan en diversos sitios de la ciudad, en viviendas, salones de eventos o casas de campo.
Los vecinos de los lugares donde se realizan las fiestas, aseguran que el alto volumen de los equipos de sonido generan molestia y en segundo lugar, la manera de vestir de los jóvenes.
“Las niñas llegan con shorts súper corticos, con los pelos en los ojos, blusas demasiado escotadas, muchas de ellas casi no tienen qué mostrar porque son unas bebés prácticamente, ¡Dios! Los muchachos se visten con pantalones a bajo de las nalgas, mostrando los calzoncillos, con buzos, cachuchas, tatuajes, piercing, algunos fuman. Además se ponen a hablar en un lenguaje raro”, afirmó una de las propietarias de una vivienda vecina donde se llevó a cabo uno de estos eventos.
Ejemplos de irresponsabilidades
Se conoció que durante el fin de semana pasado, una menor de edad, salió de su vivienda en la urbanización Nando Marín, al sur de la capital del Cesar, para una Tardeada con una de sus amigas y solo regresó hasta el domingo, tras ser encontrada por agentes de la Policía de Infancia y Adolescencia que la llevaron a un CAI.
Los uniformados, inmediatamente conocieron la ubicación de la familia de la menor y la entregaron sana y salva. “es que ella me pidió permiso para ir a una fiesta”, expresó la madre.
“Las fiestas no son malas”: ICBF
El director del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, ICBF regional Cesar, Alberto Esmeral, reconoció que las Tardeadas no son nuevas.
“Desde el año 2012 tuvimos noticias de algunos acontecimientos que se estaban realizando en Valledupar, en fincas, casas de retiro o de descanso que quedan en el entorno de la ciudad, en donde a veces los propietarios son padres de los jóvenes o familiares y las alquilan o prestan. Y las fiestas en sí mismas no son malas, son espacios para la recreación y el esparcimiento. Lo que resulta nocivo es que a allí se practiquen ciertas actividades que desbordan la moral pública”, precisó el funcionario.
Aseguró que el ICBF hizo una intervención oportuna con la Policía de Infancia y Adolescencia en varios sitios de la ciudad e incluso denunció la situación a principios de este año en un medio de comunicación.
Agregó que “observando con preocupación la manifestación de tales conductas, estamos adelantando las investigaciones pertinentes para intervenir oportunamente, antes de que el flagelo se nos desborde, aplicar las sanciones, en conjunto con la administración local a los propietarios de las viviendas o donde se presentan estas concentraciones de jóvenes y hacer intervenciones en los colegios, para verificar y restablecer los derechos y evitar que casos como estos vuelvan a presentarse”.
Un adolescente entrevistado por EL PILÓN, indicó que él hacía parte de la organización de este tipo de eventos y por tanto daba testimonio de que las Tardeadas no eran malas, sin embargo había algunas personas que lograban infiltrarse para expender drogas.
“Puede que sucedan dentro de la reunión muchas cosas malas, pero hay que ver que ahí uno también se recrea por medio de bailes, nos divertimos con los amigos y muchas veces peleamos con otros muchachos para que no hagan cosas que no todos vamos a hacer. Por ejemplo, de 30 personas sólo 10 se dedican a fumar, porque ellos quieren”, afirmó el joven estudiante.
Agregó que, “el hecho, que en apariencia, se encuentren en el ámbito privado, posibilita que jóvenes que se encuentran entre las edades de 14, 15 y 16 años estén consumiendo psicotrópicos y psicoactivos. De la misma manera, sustancias maniacodepresivas; conocidas como pepas, rore, Kawasaki y jumbo.
Sitios de las tardeadas
Según datos revelados por la Policía de Infancia y Adolescencia éstos son algunos de los sitios donde los jóvenes se reúnen para realizar las Tardeadas en los barrios Villa Miriam, La Victoria, Los Mangos, Los Fundadores, Villa Dariana, María Camila Sur, algunas casas de campo y centros de recreación.
Proliferan enfermedades sexuales
El contagio de enfermedades de transmisión sexual (ETS) en los menores, es la principal preocupación de las autoridades y padres de familia, ya que muy posiblemente los menores no se protegen en el momento de tener relaciones en dichas reuniones.
Con respecto a este tema, EL PILÓN publicó hace una semana un informe relacionado al incremento de las ETS en Valledupar. Según la noticia, en esta ciudad se registran, a través de la Secretaría de Salud Municipal 328 personas contagiadas con el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) y Sida.
El Sistema de Vigilancia Epidemiológica, Sivigila, reportó, hasta la semana 18, 45 casos de afectados con VIH. La alerta crece porque se presentan otras enfermedades de transmisión sexual como sífilis, chancroide, gonorrea, linfogranuloma venéreo y granuloma inguinal.
Otras de las que se pueden contagiar a través de las relaciones sexuales son: herpes genital, el molluscum constagiosum, la hepatitis, la sarna y el piojo púbico.
Puntos de vista
Caroline Rodríguez Corredor, estudiante.
“He visto que se realizan esas Tardeadas. A mí me parece que es un evento que realizan los jóvenes para distraerse, pero a mí no me gustan. Fui, pero decidí no volverlo a hacer”.
María Tinoco, estudiante.
“Yo no estoy de acuerdo con esas fiestas. Tengo a mis hermanos pequeños y al ver cómo la sociedad se ha dejado influenciar por esas actividades. No todos vamos, pero afecta”.
Luz María Lora. Ama de casa.
“Ese problema radica es en los papás, porque resulta que a mí me llega un hijo con un aretico y se lo arranco. Hace falta responsabilidad de los progenitores. La culpa no es de los muchachos”.
Brayan Pineda, estudiante.
“Si el Estado ayudara a hacer un evento sería mucho mejor, para que se den cuenta que puede ser un evento sano, porque ahí se pueden hacer muchas cosas, pero hay actividades buenas”.
Enrique Luis Carrillo, estudiante .
“A mí no me gusta, porque yo digo que ese es de los burros, van es a consumir droga, y eso no me gusta. Me han invitado pero no he querido ir”.
Manuela Orozco, empleada.
“Muchos padres no tienen autoridad ni responsabilidad con los hijos. Es grave que los menores estén consumiendo drogas y alcohol en estos tiempos”.
Por Unidad Investigativa / EL PILÓN