El entrenador del Valledupar F.C., Oscar Aristizabal es consciente de lo limitada que está la nómina para enfrentar mañana a Atlético Bucaramanga, pero le está ‘inyectando’ a cada uno de los jugadores un gran positivismo para que entienden que luchando se pueden conseguir los objetivos.
“Esta es una gran oportunidad que tienen muchos de los jóvenes por mostrar su buen fútbol y encaminar su futuro en el fútbol profesional, ellos tendrán la oportunidad mañana frente al Atlético Bucaramanga”, dijo.
El profesor Aritizabal conoce bien las estadísticas: Valledupar F.C. perdió los cinco juegos que realizó contra el equipo ‘búcaro’, tres veces en la cancha sintética del estadio Alfonso López y dos en el estadio Armando Maestre Pavajeau. Tiene tres goles a favor y 10 en contra.
Pero Aristizabal sabe también la historia de David y Goliat, sobre todo que ese Goliat que mañana juega aquí, está obligado a ganar, de lo contrario, el equipo que armaron los santandereanos para regresar a la primera división, ve esfumar de a poco sus aspiraciones de clasificar entre los ocho primeros del torneo.
En todo esto, nuestro David, tiene que apuntar bien la honda, para tumbar de una vez por todas esos gigantes que le han atormentado durante esta temporada, como son la falta de patrocinio, el poco apoyo del público y los malos partidos, además de los envidiosos que se alegran con cada derrota, todo por que quien entrena, no es de sus adeptos.
El partido frente a Atlético Bucaramanga se cumplirá mañana sábado a partir de las 3:30 de la tarde.
No habrá preliminar ya que se conoció que el Valledupar F.C. Sub 19 programó su juego contra Sampdoria por la penúltima fecha para el domingo a las 3 p.m. también en el estadio Armando Maestre Pavajeau.