Como si fuese una historia de nunca acabar, los habitantes de Valledupar vuelven a sentir los estragos de la carencia de gasolina subsidiada. Ayer hubo largas filas en las estaciones de servicio, EDS, donde los conductores buscaban tanquear sus vehículos con combustible a menor precio gracias al subsidio otorgado por el Gobierno a esta zona de frontera.
Lo curioso de esta ocasión es que la gasolina escaseó más temprano de lo usual; en fechas pasadas esta situación se daba los últimos tres o cuatro días del mes, esta vez se presentó desde el viernes 24, o sea a ocho días de finalizar marzo. La razón que expone la representante de Fendipetróleo en el Cesar y La Guajira, María Fernanda Mejía, es que este mes se presentó mayor consumo en las 25 EDS de Valledupar.
“No se sabe con exactitud por qué se dio esta situación, lo cierto es que se registró mayor consumo de gasolina en estos días. Hemos visto controles de la Policía, pero sigue la problemática del contrabando en las calles”, acotó.
Recordó que desde diciembre del año pasado no se percibe el cupo extra prometido con ‘bombos y platillos’ el 29 de enero del 2016 por el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas: los 500 mil galones mensuales que se sumarían a los dos millones 536 mil cupos de combustible subsidiados con que cuenta Valledupar.
“El año pasado en la reunión que se hizo con el gobernador del Cesar, el alcalde de Valledupar y representantes a la Cámara, el ministro se comprometió con un aumento de 500 mil galones mensuales, los cuales inexplicablemente desde el mes de diciembre no los han vuelto a dar, sin dar respuesta alguna al suceso”, enfatizó Mejía, por lo que exhorta a los mandatarios de la región a insistir con el gobierno central sobre la necesidad de retomarlos.
La representante de Fendipetróleo en el Cesar y La Guajira, agregó que los propietarios de las EDS están a la espera de la nueva resolución de reasignación de cupos, que estaba prevista para el primero de marzo “y prácticamente se acabó el mes y no nos ha hecho la ampliación de cupo, por lo que no sabemos cómo va a quedar el municipio”.
Por su parte, el secretario de Hacienda, Eudes Fuentes Mejía, dio a conocer que el consumo potencial de gasolina en la ciudad está alrededor de los tres millones 400 mil galones de gasolina, por lo que del 22 en adelante se agotan los cupos y a las estaciones de servicio les toca vender el combustible a precio pleno.
“Hay estaciones de servicios que a la fecha ya se han consumido el 100 % del cupo; muchas personas preguntan a final de mes por qué en unas estaciones hay gasolina subsidiada y en otras no, la razón es que no todas manejan el mismo cupo, cuando se les acaba la subsidiada venden a precio pleno, lo cual es normal”, sustentó.
El funcionario subrayó que el cupo adicional de los 500 mil galones no ha sido reasignado para la vigencia 2017. “Sabemos que los tres primeros mes del año ha sido traumático conseguir gasolina subsidiada a finales del mes.
Aspiramos que en el mes de abril todo quedé subsanado, teniendo en cuenta que el jueves 30 de marzo saldrá la nueva fórmula de asignación de cupos en las EDS, por lo que hoy estaré en la capital del país y visitaré los Ministerio de Hacienda y Minas a ver qué pasará con la ciudad”, puntualizó.
¿Sabía usted que…
El galón de gasolina subsidiada está a un precio de $6.350 y la gasolina plena está entre $7.600 y $8.300?
El desabastecimiento de combustible en la ciudad se generó desde el 2015, cuando se produjo el cierre de la frontera con Venezuela, con la consecuente disminución del ingreso de la gasolina de contrabando de la que se surtía buena parte del parque automotor de Valledupar.
Para recordar
Cuando el ministro de Hacienda llegó a principios del 2016 a Valledupar para anunciar los 500 mil galones extras de gasolina subsidiada para que se acabaran las colas de las EDS, aseguró que esto representaba un incremento del 20 % del cupo actual, y que si la medida no resultaba analizaría otras fórmulas para continuar haciendo incrementos. Pero el panorama actual es que han pasado tres meses en que la ciudad no recibe ni el cupo adicional prometido ni los incrementos previstos si esta medida no funcionaba.
Juan Carrillo.
“La gasolina no es que se acabe en la ciudad, sino que en un momento dado la venden como si fuera precio pleno; eso es culpa de la Fiscalía porque no investiga en la guía que manejan las bombas y verifican si en verdad la gasolina subsidiada se acaba o si están engañando a la gente”.
Raúl Polo.
“Me perjudica que se acabe la gasolina subsidiada, así a como a todos los que tienen carro o moto, porque lo que uno gana no alcanza para comprar gasolina más costosa; uno siempre quiere adquirirla a precio subsidiado. Pienso que este hecho se da porque hay muchos carros comprando gasolina y el cupo que asignan para la ciudad es muy bajo”.
Yesith Contreras.
“Esto se debe a la desorganización de las autoridades competentes en el tema, es por ello que se escasea la gasolina en la ciudad. Es un hecho que afecta principalmente a los que trabajamos con nuestros vehículos, porque cuando nos toca tanquear a precio pleno, manejamos las mismas tarifas a nuestros clientes, y nuestras ganancias son menores”.
Henry Jiménez.
“La situación es grave porque uno que se moviliza en moto siempre está buscando gasolina a bajo precio. Yo soy mensajero y requiero estar de un lado para otro, cuando tanqueo a precio pleno me desequilibro financieramente; cuando tanqueo a precio subsidiado lo hago con $15.000, cuando lo hago con precio plano debo invertir $25.000. Creo que el cupo que le dan a Valledupar es muy bajito con respeto a la necesidad que tiene la ciudad”.
Fabián Saurith.
“Esto es un negocio que tienen las bombas, puesto que la gasolina se acaba la última semana del mes de manera extraña. Como son pocas las bombas que finalizan el mes con gasolina subsidiada, las personas que buscamos la economía nos vemos obligado a aguantarnos largas colas para ahorrarnos así unos pesos”.
Zeider Mendoza.
“Para uno como consumidor le resulta difícil comprar gasolina a precio pleno. Del 27 al dos del otro mes siempre es la misma historia: pocas bombas tienen gasolina subsidiada, por lo que se forman filas de carros y motos; por lo general las únicas que la manejan son la de la octava, la del Terminal y la del Terminalito”.
Javith Ochoa.
“Hay unas bombas que se las tiran de vivos y antes de finalizar el mes aseguran que se les terminó la gasolina subsidiada y la venden a precio pleno, pero uno sabe que solo lo hacen para ganar más dinero, porque de ser así ocurriría lo mismo en todas las estaciones de servicio”.
Ibeth Rada.
“Me parece una situación grave porque toca aguantarse filas largas, que le quitan tiempo para labores profesionales o del hogar. Lo que se percibe es que hay mucho carro y moto y el cupo de gasolina subsidiado es muy poco. Todos los finales de mes es el mismo cuento”.
Renzo Villafrade.
“Cada vez se agota la gasolina subsidiada más rápido, de pronto se da porque en la ciudad tanquean personas que viven aquí y de pueblos cercanos. Creo que el parque automotor de Valledupar es superior al cupo asignado a las bombas. Lo que se me hace raro es que en algunas estaciones se agoten más rápido que en otras”.
“Aspiramos que en el mes de abril todo quedé subsanado, teniendo en cuenta que el jueves 30 de marzo saldrá la nueva fórmula de asignación de cupos en las EDS”: Eudes Orozco, secretario de Hacienda Municipal.
“Inexplicablemente desde el mes de diciembre no nos han vuelto a dar los cupos extras de gasolina subsidiada prometidos por el Ministro de Hacienda. Exhorto a los mandatarios de la región a insistir con el gobierno central la necesidad de retomarlos”: María Fernanda Mejía, representante de Fendipetróleo en el Cesar y La Guajira.
Annelise Barriga Ramírez/EL PILÓN