Las vacaciones y las fiestas de fin de año son una temporada en las que hay muchas ocasiones para compartir y celebrar con familiares y amigos. En dichas celebraciones los niños, niñas y adolescentes pueden estar más expuestos y tener mayor acceso a las bebidas alcohólicas.
Compartimos con ustedes algunas recomendaciones para evitar que las celebraciones de esta época se conviertan en situaciones de riesgo de consumo de alcohol para niños, niñas y adolescentes.
1. NO ofrezca bebidas alcohólicas a menores de 18 años; ni siquiera en pequeñas cantidades.
2. Si usted es quien organiza una celebración, comunique a todos los invitados que en la fiesta no se permitirá que los menores de edad consuman alcohol.
3. Si usted es invitado a una reunión, y ve que le ofrecen alcohol a un menor de edad, haga algo al respecto. Manifieste su desacuerdo a los organizadores para así dejar de normalizar el hecho de que los niños y niñas tomen alcohol.
4. Si usted decide tomar, propóngase hacerlo en cantidades moderadas (Aquí encontrará qué se refiere un consumo moderado o de bajo riesgo de alcohol para adultos).
5. Todos los adultos debemos estar atentos a dónde se dejan los vasos o copas en las que se está bebiendo, pues algunos niños toman los sobrantes de las bebidas que se dejan sin supervisión.
6. Es deseable designar a un adulto que no vaya a tomar y que siempre esté atento a los menores de edad que se encuentran en la reunión.
7. Organice celebraciones y reuniones familiares sin alcohol. Muestre que es posible divertirse y pasar un muy buen rato sin necesidad de que esté presente esta bebida.
Adicionalmente, es recomendable que como adultos nos involucremos con nuestros hijos y busquemos un espacio en el que explícitamente les digamos que NO queremos que consuman alcohol antes de los 18 años. Algunas ideas que podemos expresarles en estas conversaciones son:
1. No estamos de acuerdo con que tomen alcohol porque su cuerpo reacciona diferente a esta sustancia, afectando negativamente su desarrollo cerebral y su salud.
2. Deseamos que aprendan a divertirse y a socializar sin depender del alcohol.
3. El consumo de alcohol antes de los 18 años es ilegal y es nuestra responsabilidad protegerlos. Recordemos que la Ley 124 de 1994 sanciona tanto al menor de edad como a sus padres cuando los niños toman alcohol.