Una explosión de colores y de alegría, se vivió la noche del martes en las instalaciones de la Alianza Colombo Francesa. La exposición Fantasía de Carnaval, de la Artista Plástica Elsa Palmera, impregnó de color a los asistentes, que pudieron apreciar un carnaval lleno de máscaras alegóricas a esta fiesta.
“Es un carnaval, no necesariamente de Barranquilla, porque para mí la vida es un carnaval como la miremos; de tristezas, de alegría, de danza, de música, y yo siempre tomo lo más positivo de ese carnaval que es la vida, con la alegría del color y del movimiento y en eso me baso”, expresó la artista.
La obra está representada por máscaras de pequeños formatos, solas o agrupadas que forman comparsas llenas de color, brillo y movimiento, inspiradas en los bailes cadenciosos propios de los ritmos caribeños y africanos.
La técnica mixta que la artista utiliza le da la libertad para manipular una extensa gama de materiales; trabajó con todo lo que encontró, y entre esos materiales resaltan las cáscaras de pistachos, pedacitos de collares sueltos, y hojas, pero también hay en su trabajo hilos de seda, cobre, lana, cabuya, cinta, piedras semipreciosas, canutillos, botones, plumas, plásticos, maderas y semillas. Algunos de estos materiales vivieron una alteración con la intención de darles más color y movimiento.
Lo más frecuente en esta obra es que todo es muy intrínseco y elaborado. Su confección fue hecha pieza por pieza, entretejiendo, anudando, bordando y cosiendo a mano y en máquina, armando cada una de sus partes y dándole vida a marimondas y animales que expresan alegrías y miedos, convirtiéndolos en fantásticos seres llenos de misterio, libertad y alegría.
Tres años largos duró Elsita Palmera para realizar esta obra que presentó por primera vez en público, y que estará expuesta durante un mes en las instalaciones de la Alianza Colombo Francesa, y que se volverá a exponer en el Festival Vallenato al lado de otros artistas de la ciudad.
La obra de esta artista siempre ha sido influenciada por las singularidades de la tierra natal de su padre, por la alegría que caracteriza a los vallenatos, reflejada en el color que le imprime a sus esculturas, por la dedicación y el tiempo que emplea en realizar cada una de sus exclusivas piezas, por la vehemente decisión de abrirse camino dentro de la historia del arte moderno; la misma decisión que la lleva a regresar a las salas de exposiciones de Valledupar; buscando mostrar su estilo e inspirar a las nuevas generaciones del departamento.
Por: Antonio Peralta Nieto