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“Un vallenato” cómplice del padre Linero

Voy a vivir la vida de otra manera
Voy a seguir quemándola de otro modo
Para cuando envejezca antes que muera
No viva solo, no viva solo

Es una estrofa de la canción vallenata que más tocó el corazón de un sacerdote: “Me rindo majestad” del destacado compositor sabanero Adolfo Pacheco Anillo, grabada por “Los Betos” (Beto Zabaleta y Beto Villa) por el mismo compositor con el acordeón de Julio Rojas, Darío Pimienta con el acordeón de Emiliano Zuleta Díaz y otros, composición que fue cómplice para que el samario padre Alberto José Linero Gómez, tomara la decisión de “colgar los hábitos”. En medio de lágrimas manifestó: me retiro de la iglesia, “no quiero estar más tiempo solo”, letras de un vallenato tradicional costumbrista, vivencias que tienen mensajes que pueden influir en una decisión transcendental de la vida, como le acaba de suceder al padre Linero, un sacerdote destacado por sus predicas, con un carisma de palabras con matiz caribeño de alta aceptación, como también sus comentarios en la radio, prensa y televisión, con mucho público a favor por su carácter, cambiando su vida sacerdotal por “la vida de otra manera”, como dice la canción, para convertirse en un ser común y corriente. Creador del libro: “El Man está vivo”, ocupando en varias ocasiones el primer puesto en ventas. “Esta es una canción que me pega duro” dijo Linero, me cae como “anillo” al dedo. El artista sabanero felicito al sacerdote diciendo: “su decisión fue de buena fe y honrada”. Linero también canta vallenatos y puede convertirse en compositor porque tiene virtudes, el tiempo lo dirá. Ha sido atrapado en la “selva de las redes sociales” con críticas de toda índole, pero esto es como un chisme que se convierte como un pez fuera del agua, revolotea por unos minutos y después muere. La soledad que comenta Linero en su vida sacerdotal poco entendida, a veces piensan que fue por búsqueda de pareja, la soledad en una cuestión de matices, no existe una formula, “no me voy por un problema afectivo o sexual, sino existencial” y desea en un futuro tener pareja, es un cambio de actitud, esta decisión va a transcender no solo en Colombia, va a traspasar fronteras y esperamos comentarios del Papa Francisco que le ha impregnado alegría a la iglesia.

El vallenato en sus orígenes era como un periódico cantado que narraba episodios vividos, los juglares lo llevaban de región en región, su mensaje narrativo impregnado de poesía, penetra en las personas y hacen en los amantes del vallenato una forma de vivir, aduciendo: “esa canción me pega”. Definitivamente el vallenato es un medio de comunicación único y valioso, hace parte de nuestras vidas y tiene un futuro promisorio, no como dicen algunos críticos que se va a acabar, vendrán muchas fusiones e innovaciones, vendrán muchos compositores, pero la pureza y lo tradicional, se conservará a través de los tiempos y vendrán más “vallenatos cómplices para vivir la vida de otra manera y no estar solo”.

Por Marvin Jesús Cuel Baute

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